La ley de la Hacienda propia avanza en el Parlament

El pacto del Govern de Junts pel Sí con la CUP avanza sin tropiezos en lo que al proceso soberanista se refiere. Junts pel Sí y los anticapitalistas han dado un paso más en el Parlament hacia la aprobación de la ley de la Hacienda propia, una de las tres normas llamadas de "desconexión", y claves cara a la eventual creación del Estado catalán junto a la ley de la protección social y la referida a la transitoriedad jurídica.

El resto de grupos han presentado enmiendas a la totalidad, con distintos argumentos críticos. El más contundente a la hora de exponer su posición ha sido el popular Enric Millo, quien ha avisado a los soberanistas de que esta ley puede ser impugnada por el Estado y tener consecuencias como las que pueden pesar sobre el 'expresident' Mas, la presidenta del Parlament o las exconselleras Irene Rigau, Francesc Homs y Joana Ortega por el proceso participativo del 9-N.

El texto aprobado por JxSí y la CUp define la estructura y funciones de la Administración Tributaria de la Generalitat, creando para ello la Agencia Tributaria, la Junta de Tributos, el Consejo Fiscal y el Instituto de invetigación fiscal y de estudio tributario. En paralelo a este avance legislativo, el Govern está ampliando la dotación presupuestaria y las oficinas de la futura Agencia Tributaria propia.

La ley que hoy ha pasado el primer trámite prevé incorporar, cuando eventualmente Catalunya adquiera condición de Estado propio, la gestión de todos los tributos que se recaudan en Catalunya. Para ello, según estimaciones del Consell Assessor per a la Transició Nacional, es necesario un equipo de unos 7.000 funcionarios catalanes, en la línea de la proporción de funcionarios por habitante que existe en la Unión Europea.