CiU, ERC e ICV presentan una nueva declaración sin retirar el concepto de soberanía

Los diputados de CiU, Jordi Turull y de ERC, Marta Rovira, registran en el Parlament la nueva declaración soberanista.

Los diputados de CiU, Jordi Turull y de ERC, Marta Rovira, registran en el Parlament la nueva declaración soberanista. / ae/epp

JOSE RICO / Barcelona

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"El pueblo de Catalunya tiene, por razones de legitimidad democrática, carácter de sujeto político y jurídico soberano". Este es el nuevo redactado del punto más controvertido de la declaración soberanista que CiU y ERC, ya con la firma de ICV-EUiA, ha registrado este martes por la mañana en el Parlament. El nuevo texto, al que no se ha sumado un PSC que ha optado por presentar un texto también alternativo al primero que planteó, proclama que, "de acuerdo con la voluntad expresada democráticamente por parte del pueblo de Catalunya, el Parlament acuerda iniciar el proceso para hacer efectivo el derecho a decidir, para que los ciudadanos puedan decidir su futuro político colectivo". La CUP tampoco ha estampado su firma, pero es probable que avale la mayor parte del documento.

Así pues, CiU, ERC e ICV-EUiA han mantenido en la declaración el concepto de soberanía, irrenunciable para ellos pero inasumible para los socialistas, que entienden que abre la puerta a un proceso independentista fuera de la legalidad estatal. De hecho, la soberanía y la legalidad son dos de los principios en los que los promotores de la nueva propuesta sustentan el derecho a decidir de Catalunya. Ahora bien, el texto faculta a utilizar "todos los marcos legales existentes para hacer efectivo el fortalecimiento democrático y el ejercicio del derecho a decidir". Una redacción con la que, según sus impulsores, la consulta podría contar con la cobertura de una ley de consultas catalana o de la legislación europea en caso de que el Estado no autorice la convocatoria del referendo.

Dos novedades

El documento contiene dos novedades más. En primer lugar, y a petición de ICV-EUiA, la declaración hace recaer sobre el Parlament el "protagonismo" del proceso hacia la consulta, lo que podría vehicularse mediante la constitución de una comisión que regule y consensúe los pasos a seguir. La segunda novedad trata de contentar a la CUP, que reclamaba una referencia explícita al derecho a decidir de los "Països Catalans". Finalmente, la alusión se ha incluido en el preámbulo y sin citar esta expresión. Simplemente se recuerda que "el itinerario histórico que ha vivido Catalunya ha sido compartido con otros territorios con los que compartimos vínculos históricos, lingüísticos y culturales".