Crisis política en Argentina

Una multitud bajo la lluvia rindió homenaje al fiscal Nisman

La "marcha del silencio" se realizó a su vez en varias ciudades del país. El Gobierno insiste en que tuvo fines desestabilizadores

Cabecera de la marcha del silencio, bajo la lluvia, ayer en Buenos Aires.

Cabecera de la marcha del silencio, bajo la lluvia, ayer en Buenos Aires. / EM/nl

ABEL GILBERT / BUENOS AIRES

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Miles y miles de personas guarnecidas bajo sus paraguas de una lluvia por momentos torrencial se adueñaron anoche de la ciudad de Buenos Aires para rendirle homenaje al fiscal Alberto Nisman a un mes de su muerte. La “marcha del silencio” no solo se realizó en la capital argentina sino en los principales centros urbanos del país. No tuvieron lugar los incidentes tan anticipados y temidos. La palabra que se escuchó con frecuencia en las calles fue “justicia”. “Esto es un mensaje para toda la clase dirigente”, dijo Sergio Massa, un ex kirchnerista que en 2013 decidió abandonar el barco, pasarse a la oposición y lanzarse este año a la presidencia en nombre de los peronistas disidentes. Massa, como otras de las principales figuras opositoras en carrera para los comicios de octubre, se unieron a la multitudinaria procesión en calidad de adherentes, pero muy interesados en que los planos televisivos los enfoquen compungidos. La “marcha del silencio” había sido convocada por cinco fiscales y un juez cuya legitimidad no solo es puesta en duda por los defensores de Cristina Fernández de Kirchner. Pero el impacto que ha provocado el deceso del hombre que acusó a la presidenta de encubrir a los iraníes presuntamente implicados en el atentado contra la mutual judía (AMIA) que provocó 85 muertos en 1994, ha disuelto mucho de esos prejuicios y aversiones. La manifestación fue de una diversidad social que está huérfana de conducción política. Hombres y mujeres desfilaron en medio de la tormenta junto a la viuda del fiscal y sus hijas. Fueron del Congreso a la Plaza de Mayo, frente a la sede del Poder Ejecutivo, apenas unidas por el espanto. Creen que el Gobierno ha sido responsable de esta tragedia por acción u omisión de la suerte que corrió Nisman.

Como era de suponer, los argentinos se dividieron otra vez. “Yo no voy”, fue la consigna de aquellos que rechazaron el 18F. El kirchnerismo optó por realizar una “marcha virtual” en twitter que, bajo el lema “Todos con Cristina”, se ubicó en segundo lugar en las tendencias de un día agitado. "Este Gobierno no permite que nadie le marque la cancha", dijo por su parte la presidenta, resuelta  a no ceder un milímetro.

CONTINUA LA INVESTIGACIÓN

Mientras los manifestantes se iban reuniendo en el centro capitalino y las cámaras televisivas los captaban como parte de un mar humano bajo paraguas, la fiscal Vivian Fein, encargada de determinar si su colega se suicidó o fue asesinado, llevaba adelante, muy cerca del epicentro de la protesta, tareas sumamente importantes. Fein informó ayer que ya interrogó bajo un fuerte hermetismo al ex hombre fuerte de la Secretaría de Inteligencia (SI) Antonio "Jaime" Stiuso. Se trata de un testimonio clave. Antes de que la sien de Nisman recibiera un balazo letal, el fiscal habló varias veces por teléfono con Stiuso quien, pese a haber sido echado el 17 de diciembre de la SI seguía en los hechos desempeñándose como si nada habría ocurrido. Además de avezado conspirador, Stiusso era el principal soporte de Nisman y el proveedor de toda la información que le hacía llegar la CIA y el Mossad y que se dirigía exclusivamente a sostener la hipótesis de la culpabilidad iraní en la causa AMIA.

A su vez, Fein recibió ayer los peritajes toxicológicos practicados sobre el cuerpo de Nisman. Las conclusiones no se han dado a conocer para preservar el curso de la investigación, pero se supone que hay nuevos elementos reveladores. Las pruebas por ahora se inclinan hacia la primera de las hipótesis. Pero si eso llegara a comprobarse, las percepciones de quienes marcharon no cambiarán. CFK ha contribuido a instalar esa percepción entre sus adversarios al sugerir que Nisman fue asesinado antes que concluyeran las labores de Fein.

Horas antes de la marcha, el Gobierno insistió en su idea de que enfrenta un “golpe blando” que llevan a cabo parte de la corporación judicial y mediática. El ministro de Defensa, Agustín Rossi consideró que la movilización forma parte de un plan que apunta a impugnar a la fiscal.

LOS USOS DE LA FIGURA DE NISMAN

No importa demasiado a estas alturas si la denuncia de Nisman contra CFK es inconsistente o, a lo largo de una década, el fiscal repitió como un loro los informes reservados de la CIA y era de una poderosa docilidad frente a la diplomacia de EE.UU, como evidenció wikileaks. Ahora es un blasón del antikirchnerismo. El ex diputado de derechas Fernando Iglesias consideró que su muerte ha mostrado la “bajeza” de un régimen con rasgos característicos “de toda dictadura: quien desafía al poder muere violentamente”. Los excesos en las interpretaciones, toda una cultura del agravio gratuito o la ligereza, no son patrimonio exclusivo de la oposición. El senador kirchnerista Salvador Cabral dijo, suelto de cuerpo, que el de Nisman ha sido un “crimen pasional entre un amor homosexual”. Diego Lagomarsino, el asesor informático, y quien le facilitó al fiscal la pistola que le causó la muerte, lo “encontró en situaciones amorosas” a Nisman “y le pegó un tiro en la cabeza".