PROTESTAS EN EGIPTO

Presión internacional sobre Mubarak para que aplique las reformas

Francia pide el fin de la violencia y recuerda que el pueblo es soberano

AGENCIAS / Bruselas

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La presión internacional crece sobre el gobierno de Hosni Mubarak para que aplique las reformas prometidas y calme las protestas que exigen su dimisión. 

El presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha enviado un comunicado al presidente egipcio, Hosni Mubarak, para advertirle que "las intervenciones militares no llevan solas al cambio" y que es "necesario operar en un clima de diálogo constructivo". Van Rompuy "espera" que "las promesas de apertura se traduzcan en actos concretos".

Van Rompuy apela al "fin de la violencia y del baño de sangre" en Egipto y repite el mensaje de la alta representante de la UE, Catherine Ashton, de que se libere a los detenidos en las protestas.

Cese de la violencia

También Francia ha subrayado la necesidad de que "la violencia cese" en Egipto y ha recordado a la comunidad internacional que "el pueblo egipcio es quien decide", por lo que "ningún país debe tomar su lugar".

"Nadie puede aceptar esta oleada de violencia ni que haya muertos. Es necesario que la violencia pare, que se instaure el diálogo y que haya señales de que las reformas que ha prometido el presidente (Hosni) Mubarak comiencen", dijo el primer ministro, François Fillon, en declaraciones recogidas por la emisora France Info.

El primer ministro recordó que "Egipto es un gran país que tiene mucho peso en la estabilidad de Oriente Medio", y añadió que "hace falta que la gente tenga la esperanza de avanzar por el camino de la democracia y de la libertad".

El ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, ha incidido en la misma línea y ha instado a Mubarak a "escuchar urgentemente" a los manifestantes que desde el martes protestan contra su régimen. "Continuamos profundamente preocupados ante el nivel de violencia que hemos presenciado en los últimos días y pedimos al Gobierno que sea comedido y a los egipcios que reivindiquen sus quejas legítimas de forma pacífica", afirmó Hague en un comunicado.