Y Quijote y Sancho comieron en Via Veneto

Los coleccionistas de objetos gastronómicos deberían dejarse caer el miércoles por Via Veneto, porque solo ese día se expondrán las cartas de Fin de Año que el restaurante ha ido creando durante los últimos 40 años. Es tal el éxito de estas láminas que los comensales se las llevan a casa como recuerdo y como motivo de colección, de modo que, para celebrar las cuatro décadas de las ediciones limitadas de estos menús, la familia Monje las mostrará solo ese día.

Hasta 1997, la carta de Fin de Año siempre fue la misma: reproducía un cuadro de Ricard Canals que había a la entrada del local y «que gustaba mucho a la gente», recuerda Pere Monje. Luego empezaron a cambiarlas. Entre ellas aparecen don Quijote y Sancho Panza en una ilustración al estilo de Gustave Doré, aunque ubicada en este clásico barcelonés, que ostenta una estrella Michelin desde 1976. Aquella carta era del 2004. También se homenajeó a Salvador Dalí (2003), ilustre cliente, justo antes de que se comenzara a celebrar su centenario, al año siguiente). Y a Renoir y a Tolouse-Lautrec... «Es una noche especial, irrepetible, por eso hacemos cartas únicas». Por eso la exposición será única, solo el día 31.