ESCÁNDALO FINANCIERO

La cúpula de Caja Madrid gastó 15,5 millones en beneficio propio

Más de 80 directivos usaron tarjetas de la caja y Bankia para compras y sacar dinero

Miguel Blesa tras declarar en la Audiencia Nacional el pasado mes de marzo.

Miguel Blesa tras declarar en la Audiencia Nacional el pasado mes de marzo.

P. ALLENDESALAZAR / M. BATALLAS / MADRID

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Las cúpulas de Caja Madrid y de Bankia no solo llevaron a estas entidades a la ruina sino que además se gastaron 15,5 millones de euros de las dos instituciones en gastos privados como restaurantes, viajes, hoteles, ropa y complementos, alimentación y retiradas de efectivo. El sistema estuvo vigente desde el 2003, durante las presidencias de Miguel Blesa Rodrigo Rato, y hasta que lo abolió su actual primer ejecutivo, José Ignacio Goirigolzarri, tras la nacionalización del grupo en el 2012.

Así aparece recogido en un informe elaborado por el actual equipo de Bankia, que ha llevado a la fiscalía anticorrupción a abrir una investigación al entender que hay indicios de un posible delito societario y de apropiación indebida. Entre los beneficiarios más destacados, además de los propios Blesa y Rato, aparecen políticos del PP, PSOE e IU, así como sindicalistas.

El sistema de pagos dependía directamente de Ildefonso Sánchez Barcoj, director financiero de Caja Madrid y mano derecha de Blesa, que siguió en el cargo con Rato. No pasaba ni por la división de tarjetas ni por recursos humanos y «no consta» que los beneficiarios pagaran los impuestos correspondientes.

La operativa no estaba amparada por los contratos de los usuarios de las tarjetas ni por los órganos de gobierno o los estatutos de la entidad. Un total de 86 directivos y consejeros de Caja Madrid poseían estas tarjetas entre el 2003 y el 2012, con las que gastaron 15,24 millones de euros. Tras la creación de Bankia, 25 altos cargos (5 de la entidad y el resto de la caja, aunque la factura se cargó al banco) se beneficiaron de otros 245.200 adicionales.

GASTOS DE REPRESENTACIÓN

La investigación de la auditoría interna de Bankia, que su accionista público el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha enviado a la Fiscalía, destaca que los responsables de la caja usaban el dinero básicamente para gastos personales. «La utilización de esas tarjetas según los datos del informe no aparece conectada con los gastos de representación o relacionados con actividades profesionales de los disponentes», apunta el ministerio público.

Entre los principales beneficiarios en Caja Madrid destacan el propio Sánchez Barcoj (484.200 euros), José Antonio Moral Santín, consejero en representación de IU (456.500), Blesa (436.700) y el ejecutivo Matías Amat (389.900). También hay políticos vinculados al PP (Mercedes de la Merced, Estanislao Rodríguez-Ponga o José Manuel Fernández Norniella) y al PSOE (Antonio Romero, José María de la Riva o Ángel Gómez del Pulgar). La dirección socialista prevé exigirles que devuelvan el dinero y abrirles un expediente que puede resultar en su expulsión.

DEVOLUCIÓN

En el caso de Bankia, figuran Sánchez Barcoj (90.000 euros) Rato (54.800), Fernández Norniella (9.700) y Amat (42.000). El consejero delegado, Francisco Verdú, no usó su tarjeta. El banco ha logrado que le devuelvan estas cantidades pero los directivos no han justificado su uso como gastos de representación.

La investigación de Anticorrupción se ha incorporado a la causa abierta en la Audiencia Nacional por la salida a bolsa de Bankia y las cuentas de la entidad, que pasó de dar beneficios a pérdidas multimillonarias tras su nacionalización.