TV-3: de Quim Torra a Núria de Gispert

En estos años de transformación de TV-3 en la cadena privada e hiperventilada del procés, es muy interesante observar Polònia. Ya sabemos que como troupe sarcástica y mordedora de la política española son insuperables. Estupendos. Esta semana sacaron a Pedro Sánchez (Pep Plaza) agasajado por los suyos, como un héroe, tras su triunfo electoral; y al girarse vimos que le había brotado, graciosamente, un ramo de flores en el trasero. ¡Ahh! Si Luigi Pirandello escribió una obra titulada L’uomo dal fiore in bocca, los polacos han dibujado a Sánchez como El hombre de la flor en el culo. Está bien visto, sí señores. También han hecho aparecer a Soraya y a Rajoy llamando Pablo Fra-Casado al actual líder del PPPabloFra-Casado; y naturalmente se tiraban de risa por el suelo. O sea, que su mordiente sobre els espanyols –por usar terminología indepe– sigue siendo excelente.

Pero de Polònia lo que hay que observar con detenimiento es si también mantienen la intensidad de su sátira sobre esas criaturas tan principales y nostrades de la cofradía processista, y monaguillos adyacentes. Esta semana han sacado a Quim Torra. Se esforzaba para que creyésemos que JxCat había tenido un gran éxito en estas últimas elecciones. Pero viendo que no se lo creía ni él, acabó exclamando. «Bueno, pensemos que las elecciones las ha ganado CDC, que ahora se ha cambiado el nombre y se llama ERC». ¡Ahh! Tiene lecturas diversas este gag. No solo es una perdigonada a los esperpénticos cambios de nombre de Convergència; también es una andanada a ERC, alineándose los polacos con los que dicen que Esquerra camina ahora hacia la fórmula que tanto éxito dio a Convergència: la de ir haciendo la puta i la ramoneta, i qui dia passa any empeny. Interesante golpe irónico.

Pero lo más afilado y afinado ha sido ese aire, ese aspecto, esa patética estampa con la que queda dibujado Torra en Polònia, que más que un honorable President parece un estrafalario ninot sacado de las historietas de El botones Sacarino del TBO. Esta causticidad de Polònia, sin ser perfecta, es un oasis en TV-3.  Lo normal en esta cadena es lo que hizo en Tot es mou la cheerleader Melero: hacerle un masaje a Núria de Gispert vía telefónica, intentar que quede la mar de inocente e ingenua, y tergiversar el retuit porcino retuitcomo si fuera cosa de unos duendes. ¡Ahh! Este verano supongo que la paella se la comerá en Waterloo. Se lo merece.