"Necesito este cambio"

La carta que Anna Marín dejó a sus familiares antes de desaparecer

La madre que tiró a la basura el cuerpo de su hijo discapacitado pide cobrar el paro

Anna Marín desaaprecida

Anna Marín desaaprecida / SOS Desaparecidos

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La desaparición de Anna Marín, de 21 años, es un misterio plagado de incógnitas. Aparentemente con una vida de lo más normal, esta estudiante de Historia en la Universidad de Alicante viajó el pasado mes de julio a Perú por primera vez, en un destino que se repitiría a lo largo del caso. Pese a que avisó a sus padres de que iría acompañado de unas amigas, la joven ilicitana lo hizo sola.

Un mes más tarde, el 29 de agosto, Marín comunicó a su familia que pasaría unos días en el campo con las amigas, pero no fue así: volvió al país latino sin siquiera billete de vuelta. Lejos de querer regresar a casa, la chica volvió a mentir diciendo que había encontrado un trabajo en Madrid, donde se quedaría una temporada; cuando en realidad se encontraba en el país americano, tal como revelaron las tarjetas de crédito.

Tras días sin dar señales de vida y con la organización SOS Desaparecidos al tanto de la situación, Marín volvió a contestar asegurando qeu había rehecho su vida en territorio peruano. Los testimonios de amigos de la joven, que aseguraban que en los últimos meses había cambiado, fueron la señal definitiva para que varias asociaciones comenzasen una búsqueda multitudinaria de la desaparecida.

Despedida y disculpas

Antes de su desaparición a finales del mes pasado, Marín dejó una carta a la que el programa 'Más Vale Tarde' ha tenido acceso. El escrito decía lo siguiente: "Esto es una carta de despedida y de disculpas por marcharme de esta manera. Necesito este cambio. Tengo dinero suficiente, si algún día lo necesitáis os lo daré. Yo misma cosecharé mis propios cultivos y mi propio campo. Todo irá bien. Os quiero, familia". El texto levantaba sospechas por su formalidad, lo cual apunta a una posible vinculación de la joven con una secta.