Enseñar las matemáticas con materiales y reforzar la oralidad en la comprensión lectora: la fórmula de Educació para remontar PISA

El 9 de abril la consellera Anna Simó presentaba en el Consell Escolar de Catalunya su retorno a las propuestas del grupo de expertos formado para calmar las aguas tras el revuelo generado por la mala imagen de la escuela catalana que proyectaban los resultados del último informe PISA. Respuesta que llegaba en un contexto que no era el esperado cuando se creó el citado grupo -sin presupuestos y con una convocatoria de elecciones anticipadas a la vuelta de la esquina- y que recogía y volvía a poner sobre la mesa algunas medidas ya anunciadas previamente (nacidas a partir de los malos resultados en las competencias básicas del curso pasado), como que el próximo curso 24-25 empezará un plan de mejora de la comprensión lectora que se iniciará en 250 centros públicos y privados concertados y un nuevo programa de mejora de las matemáticas en 200 centros educativos en primaria y ESO ("los centros con más margen de mejora"). Dos medidas que, dos semanas más tarde, este miércoles, han vuelto a ser anunciados, esta vez por la portavoz del Govern, Patricia Plaja, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell Executiu, que los ha aprobado.

El programa Florence, como han bautizado el plan de matemáticas, incluye la creación de un perfil profesional de matemáticas

Este miércoles, eso sí, el Departament ha ofrecido algunos detalles sobre ambos programas, entre los que destaca fomentar las matemáticas manipulativas [es dedir, trabajar la materia con materiales que los alumnos puedan tocar, manipular, como por ejemplo los Tangrams para trabajar el cálculo de áreas y perímetros] y poner el foco en la oralidad como base para mejorar después la comprensión lectora.

El 50% de los errores en matemáticas cometidos en PISA no se deben tanto a no saber hacer operaciones, sino en no saber qué operación hacer para resolver cada problema

Fuentes del Departament señalan que pese a que los programas se llevarán a cabo solo en los 200 y 250 centros "con más margen de mejora", estos nuevos recursos "tendrán impacto en el conjunto del sistema".

Problemas de comprensión

Hay algo en común entre las dos cuestiones. Tanto en primaria como en secundaria, el 50% de los errores en matemáticas cometidos por los alumnos en PISA no se deben tanto a no saber hacer operaciones matemáticas, sino en no saber qué operación hacer para resolver cada problema. Es decir, la base de los errores en matemáticas es también, en gran parte, de comprensión.

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Partiendo de ahí, el programa presentado este miércoles, que la conselleria ha bautizado como Florence [en homenaje a Florence Nightingale, pionera en el análisis estadístico de datos sanitarios], pone el foco en las matemáticas manipulativas para reforzar ese "entender qué se está haciendo; qué lógica hay detrás de cada operación". Para ello, el Departament ha anunciado que adquirirá "maletas de matemáticas manipulativas" que enviará a los 200 centros seleccionados, con materiales como Tangrams o palos de matemáticas.

Participarán en el programa Florence 120 centros de primaria y 80 de ESO, "priorizando los de especial complejidad que estén interesados en mejorar en matemáticas"

El programa Florence nace con la intención de tener una duración de tres años a partir del próximo curso 24-25. Contará con un equipo con 12 docentes de primaria y dos de ESO, y el objetivo es que, en este tiempo, los centros participantes alcancen "resultados superiores a la media de los centros de su tipología" (es decir, de su misma complejidad). Participarán en él 120 centros de educación primaria y 80 de educación secundaria, "priorizando los de especial complejidad que están interesados en mejorar sus resultados en matemáticas".

Este mes de junio habrá una convocatoria pública para que los centros interesados se presenten para participar en estos planes. La resolución se sabrá a principios de julio. Según los cálculos del Departament, en otoño se prepararán las actividades y en enero del 25 las escuelas ya podrían empezar a trabajar en estos proyectos.

Nuevos criterios de evaluación

Otra de las cuestiones relevantes del Florence es que incluye la creación de un perfil profesional de matemáticas, medida que el Departament explica que ya está trabajando con todas las universidades (y era una de las propuestas del grupo de expertos para remontar PISA). Incluye también la creación de una "guía curricular para las matemáticas, con criterios de evaluación para cada ciclo, que orienten los procesos de aprendizaje y sirvan de apoyo a los docentes y centros a la hora de programar y diseñar actividades de aprendizaje".

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Fuentes de la conselleria señalan también que durante este curso se han puesto en marcha algunas medidas para la mejora de la competencia matemática como la creación de 1.000 nuevas plazas en cursos de matemáticas a través de acuerdos con los institutos de ciencias de la educación.

La misma voz destaca "el trabajo conjunto con las universidades para la creación de posgrados de matemáticas, menciones de matemáticas en los grados y acuerdos conjunto para mejorar la formación inicial y continuada" y la formación en codocencia, didáctica manipulativa y tutorización en matemáticas para los docentes de los centros implicados en el programa.

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En cuanto al plan de mejora de la comprensión lectora, la conselleria ha vuelto a explicar proyectos como el plan piloto de mejora de las bibliotecas escolares en 35 centros públicos y 15 privados-concertados o la publicación de las nuevas orientaciones de lectura literaria en las distintas edades.

La importancia de la oralidad

El Departament resume en ocho componentes las claves para garantizar la buena competencia lectora. El primer año del plan se trabajarán los primeros cuatro: fluidez, descodificación, vocabulario y contenidos y estrategias de comprensión; y, el segundo, los otros cuatro: educación literaria, lectura en las áreas y materias, dimensión personal de la lectura y dimensión social de la lectura. En el centro de estos ocho elementos, la oralidad: desarrollar el habla y el pensamiento mediante el diálogo y la conversación.