Más de la mitad de ciudades catalanas que tendrán ZBE superan los umbrales de contaminación fijados para 2025

La mayor parte de las ciudades no metropolitanas de Catalunya y más de 20.000 y 50.000 habitantes afectadas por las futuras zonas de bajas emisiones (ZBE) superan también los límites de contaminación establecidos por el Parlamento Europeo y que entrarán en vigor en 2025. Según la ley impulsada por el Ministerio para la Transición Ecológica, estas localidades deberán tener una ZBE que está preparando el Govern a través de un plan que ha generado discrepancias entre el Ejecutivo y varios alcaldes críticos.

Además de los municipios del área metropolitana de Barcelona (casi todos superan estos límites), que tendrán una ZBE conjunta, los datos tampoco son positivos en el resto de ciudades de Catalunya donde habrá una ZBE.

Dos de los contaminantes más importantes son el óxido de nitrógeno (NO2) y ciertas partículas en suspensión (PM10). Según las cifras recogidas en las estaciones de control de la Generalitat, 11 ciudades rebasan los 20 microgramos por metro cúbico de NO², que es el futuro umbral europeo y el de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En cuanto a las partículas en suspensión, casi todas (excepto Igualada y Vilafranca del Penedès) exceden los 20 microgramos de PM₁₀ por metro cúbico.

Las ciudades más habitadas del Vallès (Terrassa, Sabadell, Barberà o Granollers) son algunos de los puntos más críticos

Las localidades con peores datos de óxido de nitrógeno están en los Vallès, dos comarcas con municipios muy poblados y con polígonos industriales. Terrassa, Sabadell y Granollers, por ejemplo, son junto a Vilanova i la Geltrú (Garraf) y Mataró (Maresme), ciudades con un porcentaje de vehículos 'sin etiqueta' o con 'etiqueta B' que se acerca al 50%. El Govern, sin embargo, plantea que si se tiene en cuenta el parque de automóviles circulante y no el registrado, el porcentaje no es tan elevado y se queda en un 14%.

Grandes autopistas

La importante proporción de estos coches más contaminantes en las grandes ciudades es uno de los factores que puede explicar los elevados niveles de contaminación. Sin embargo, varios de los alcaldes molestos con el plan de ZBE del Govern esgrimen que la contaminación, en parte, también se debe al hecho de que grandes autopistas de titularidad estatal o autonómica cruzan su término municipal.

La extensa red de sensores de Sabadell, que no tienen otras ciudades vallesanas, muestra datos aún peores de los que constan en la estación de control de la Generalitat. Muchos días, en la ciudad, se superan los estándares de la OMS, también en zonas céntricas y semipeatonales como la más cercana al ayuntamiento.

Muchos días, en Sabadell, se superan los estándares de la OMS, también en zonas céntricas y semipeatonales

Varias entidades ambientales lideradas por ADENC (Associació per la defensa i Estudi de la Natura) han firmado un manifiesto exigiendo una zona de bajas emisiones contundente y la mejora y promoción de la red de transporte público. El ISGlobal, en su ránking de 1.000 ciudades europeas, sin ir más lejos, calcula que en Sabadell mueren prematuramente unas 300 personas por emisiones contaminantes.

Días concretos

Es importante remarcar que los datos remitidos por Acció Climàtica son una media anual. Por lo tanto, en muchos casos, el exceso de contaminación ha sido mucho más alto del que muestra el promedio. En partículas en suspensión, destacan negativamente Vic, Lleida, Manresa o Manlleu. En estas ciudades, destaca la presencia de granjas y explotaciones ganaderas, además de una gran cantidad de calderas de leña que queman biomasa.

El nuevo plan de Calidad del Aire que prevé aprobar el Govern y que incluye las polémicas zonas de bajas emisiones, también propone medidas para reducir la contaminación en la Catalunya Central, especialmente en Osona.

El exceso de ozono, un contaminante que se genera en el área de Barcelona pero que por la orografía acaba en esta zona, es una de las razones, entre otras, que justifica el exceso de partículas en suspensión. La realidad es que tanto en Osona como en el Vallès han surgido entidades, como Mollet i Baix Vallès Respira, para pedir más acciones que ayuden a mejorar la situación. Tarragona y Girona son las dos capitales de provincia (junto a Barcelona) que superan los dos límites de contaminación que entrarán en vigor en 2025. En el caso de Lleida, no llega a rebasar el tope de NO₂.

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