Estafas

Los Mossos avisan de la última modalidad de sextorsión: “Para que les pagues en bitcoins”

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El bitcoin y otras criptomonedas dependen del agua

El bitcoin y otras criptomonedas dependen del agua / Pixabay

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Los Mossos han lanzado este domingo un aviso por una nueva estafa que consiste en una práctica de sextorsión con el objetivo de que la víctima les pague en bitcoins. Todo comienza con un correo en el que el supuesto ciberdelincuente amenaza al afectado con publicar imágenes comprometidas del mismo. "He grabado algunos vídeos tuyos masturbándote con 'películas para adultos' muy controvertidas", se puede leer en la captura del correo que adjuntan los Mossos.

Con tal de que este presunto material no vea la luz, los delincuentes piden una compensación en forma de criptomonedas: "Transfiere 750 USD a mi monedero bitcoin", indican a la víctima, que tiene un plazo de 48 horas para completar dicho trámite.

No es un ciberataque

La posibilidad de contactar con las autoridades también queda descartada a medida que avanza el correo: "No llames a la policía. Recuerda que tengo acceso a todos tus dispositivos y en cuanto me percate de dicha actividad, procederé automáticamente a publicar todos los vídeos", dice el supuesto 'hacker'.

Con todo, es importante subrayar que, tal como advierten los Mossos en la publicación de X (antes Twitter) a través de la cual han difundido este mensaje, no se trata de un ciberataque real: "No te han infectado el 'malware' ni tienen imágenes tuyas, es una estafa", dejan claro desde los cuerpos policiales.

¿Qué es la sextorsión?

Según la definición propuesta por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la sextorsión consiste en el "chantaje por parte de un ciberdelincuente para que la víctima realice una determinada acción o entregue una cantidad de dinero bajo la amenaza de publicar o compartir imágenes íntimas que de ella tiene".

En caso de que la intimidación termine por hacerse realidad, la publicación de material gráfico de este tipo supone una vulneración de su intimidad, su derecho al honor y su propia imagen, además de otros efectos colaterales que pueden afectar a otras cuestiones personales del afectado o afectada.

En cuanto a la prevención, desde el citado organismo recomiendan no compartir ni reproducir imágener íntimas personales o de cualquier otro usuario. Asimismo, destacan el papel de la "educación en el respeto de la intimidad ajena".