Bea, esposa de un paciente de cuidados paliativos: “Con la música conseguí desbloquearme emocionalmente y expresarle lo que sentía en palabras”

Carlos, que falleció de un glioma de grado 4 en abril, y Beatriz, su mujer, participaron en las sesiones de musicoterapia que ofrece el Hospital del Mar de Barcelona 

Esta terapia complementaria reduce el estrés y la ansiedad, además de aliviar el dolor y el cansancio en pacientes de cuidados paliativos 

El proyecto surgió hace más de una década y contó con la participación de Mémora, en un momento en que era necesaria la financiación para seguir desarrollándolo 

Una sesión de musicoterapia en el Hospital del Mar de Barcelona

Una sesión de musicoterapia en el Hospital del Mar de Barcelona / Cedida / Hospital del Mar

Xavier Oliva

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Aunque a simple vista no lo parezca, puesto que tan solo se trata de ondas que se transmiten por el aire, la música cura. No lo hace en sentido físico, pero sí puede aliviar el dolor. Y ese fue el caso de Carlos, paciente de la Unidad de Cuidados Paliativos (UCP) del Hospital del Mar de Barcelona, que falleció en abril tras luchar durante seis meses contra un glioma de grado 4, una forma de tumor cerebral muy agresiva. Tanto él como su mujer, Beatriz Sogorb, participaron de las sesiones de musicoterapia que, desde hace ya más de una década, el centro hospitalario barcelonés ofrece a pacientes con cáncer ingresados en cuidados paliativos.  

Esta terapia complementaria se ha mostrado muy efectiva en los diferentes ensayos clínicos llevados a cabo en todos estos años, logrando reducir el estrés y la ansiedad, pero también aliviando el dolor y el cansancio de los pacientes. “Estuvimos muy abiertos desde el principio. A Carlos le encantaba la música y, conforme avanzaba la enfermedad y estaba más cansado, cuando venían a hacernos la sesión de musicoterapia se despertaba y le alegraba el día”, explica Sogorb.  

En una situación de final de vida, el tiempo es oro"

Cristina Farriols

— Jefa de sección de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital del Mar

En las sesiones de musicoterapia, la música en vivo es la gran protagonista. En ellas se canta y se toca canciones conocidas junto a los musicoterapeutas del centro sanitario que, actualmente, se trata mayormente de profesionales formados en el máster de Musicoterapia que ofrece IL3-UB. Una herramienta de acompañamiento emocional para los pacientes y también para sus familias, que humaniza el paso por cuidados paliativos. “Estamos ante una situación de final de vida. El tiempo es oro y llenarlo con algo que aporte algún beneficio es fundamental”, asegura la doctora Cristina Farriols, jefa de sección de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital del Mar.  

Terapia con música en directo en cuidados paliativos

monitorizó cómo reaccionaba a la terapiabeneficios de la musicoterapianeurofeedback’

El Hospital del Mar fue pionero en la aplicación de esta terapia complementaria. El proyecto surgió en 2011 a través de una beca del mismo centro sanitario y, hace diez años, tras finalizar esta y en un momento en que se necesitaba más financiación para seguir desarrollando esta terapia, contó con el apoyo de la Fundación Mémora. De hecho, para Mémora fue la primera participación en un proyecto de este tipo, pero no el último, porque posteriormente ha promovido la musicoterapia en otros hospitales del país.  

La doctora Farriols explica que en las sesiones de musicoterapia se tiene en cuenta la relación del paciente con la música. “Es algo muy personalizado. Se valora la historia de vida de la persona i su historial musical. Así, por ejemplo, se tiene en cuenta qué canciones han marcado su vida”, afirma. “En las sesiones cantábamos juntos canciones que nos gustaban como “Por mil años más” o, por ejemplo, también “River flows in you” de Yiruma, que es de base instrumental, y que también pusimos en su funeral junto a “Armagedon” de Aerosmith. Él nos había dicho que quería que sonaran cuando aún estaba bien”, apunta Beatriz por su lado. 

Los beneficios de la musicoterapia afectan, sobre todo, a la parte emocional"

Cristina Farriols

— Jefa de sección de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital del Mar

A través de los diferentes ensayos clínicos llevados a cabo, se ha demostrado que la musicoterapia aporta una gran cantidad de beneficios tanto a los pacientes como a los profesionales. Esto se sabe gracias a que, desde el principio, la parte asistencial ha contado con el apoyo de la investigación para seguir creciendo. “Se trata de beneficios que afectan, sobre todo, a nivel emocional. Se reducen la ansiedad y los miedos fruto de ese momento tan difícil. Pero también mejoran síntomas físicos como el cansancio o el dolor”, apunta Farriols.  

Apoyo emocional a familiares de cuidados paliativos

La musicoterapia va más allá de los pacientes. También es una terapia muy efectiva para las familias y una forma de poder expresarse en un momento tan difícil. Para Sogorb fue una liberación. “Yo tengo estudios de auxiliar de enfermería y cuando me enteré de que Carlos estaba enfermo pasé de ser su mujer a ser su enfermera. Con la música conseguí desbloquearme emocionalmente, abrirme a través de ella y poder expresarle lo que sentía con palabras”, afirma Bea. 

Con la música conseguí desbloquearme emocionalmente y poder expresarle lo que sentía con palabras"

Beatriz Sogorb

“Y si me dices que estás conforme con tu vida, yo no me doy por vencida, yo quiero darte mucho más, amarte hasta el final”. Así es el estribillo de la versión de la canción “Photograph” de Ed Sheeran que Sogorb compuso para Carlos en sus sesiones de musicoterapia. Y, precisamente, el día que se la cantó junto a al hijo de ambos, aún bebé, es uno de los momentos que tanto ella como el equipo de cuidados paliativos del Hospital del Mar recuerdan especialmente de su paso.  

Beatriz y Carlos junto a su hijo y una musicóloga del Hospital del Mar

Beatriz y Carlos junto a su hijo y una musicoterapeuta del Hospital del Mar / Cedida

“Cuando la acabé y se la canté ya no era el Carlos que yo había conocido. Era como un niño grande. Me miraba a los ojos y me pidió que se la cantase siempre. Fue un momento muy bonito que compartimos con nuestro hijo. Todo el equipo del hospital se emocionó”, recuerda.