Crisis hídrica

La peor sequía del siglo: Catalunya se debería inundar medio metro para revertirla

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El embalse la Llosa del Cavall, esta semana.

El embalse la Llosa del Cavall, esta semana. / ACN

Guillem Costa

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"Esta sequía es la más persistente e intensa que se ha observado jamás". Así de clara es la directora del Servei Meteorològic de Catalunya (SMC), Sarai Sarroca, a la hora de calificar la actual situación de escasez. Si los embalses no están peor es porque se usa agua regenerada y desalinizada. Sin embargo, nunca en la historia se había registrado un déficit de lluvias tan grave.

"No prevemos ninguna ventana de oportunidad que nos permita salir de esta situación"

— Sarai Sarroca, Meteocat

De media, en Catalunya, en tres años, llueven unos 1.900 litros por metro cuadrado. Pero en los últimos tres años, desde octubre de 2020 hasta hoy, solo han llovido unos 1.400. Por lo tanto faltan 500 litros de agua. ¿Cuánto son 500 litros de agua? "Pues una cantidad que inundaría toda Catalunya con medio metro de agua si cayera de golpe", explicita Sarroca. Cabe precisar que son las precipitaciones que habría a lo largo de 36 meses.

La cuenca de los ríos Ter y Llobregat es de las que acumula más déficit (ahí están embalses como el de Sau, Susqueda o la Llosa del Cavall). Pero la del río Muga, en el Alt Empordà, se lleva la palma. De hecho, las cuencas internas, que son la "zona húmeda" de Catalunya, son las que más han sufrido la falta de precipitaciones. En un mapa que muestra la diferencia entre lo que ha llovido y lo que solía llover, la parte sombreada es la zona este de Catalunya, es decir, la que corresponde a las cuencas internas, las cuales abastecen a las comarcas de Girona y Barcelona, donde hay más población.

Sin expectativas

Collserola, el golfo de Roses y el resto del Empordà o el Garraf son algunos ejemplos de zonas que han sido especialmente secas. Otra variable clave es la temperatura. También ha sido más alta de lo habitual. Este factor tampoco ayuda a ríos y pantanos, ya que el agua se evapora con más facilidad.

En las cuencas del Ebro, donde también hay sequía, el escenario no es tan crítico. "Lo peor de todo es que no prevemos ninguna ventana de oportunidad que nos permita salir de esta situación, puesto que las próximas precipitaciones abundantes suelen llegar en primavera", avisa Sarroca. La responsable del Meteocat ha anunciado lluvias para la próxima semana, pero advierte de que no serán suficientes para revertir la situación.

"Muchos de los frentes lluviosos que van dirección a la península procedentes del Atlántico se acaban frenando en las Azores o se desvían hacia zonas más al norte de Europa", precisa Sarroca. Desde el temporal Glòria, en enero de 2020, no ha habido ninguna llevantada en Catalunya que haya dejado grandes cantidades de agua.

Aquel temporal llenó los pantanos, pero a partir de otoño del mismo año empezaron a vaciarse. Y desde entonces, el déficit de lluvias se va acumulando mes a mes.