Violencia de género

Igualdad pide que las víctimas de la violencia machista vayan acompañadas a recoger sus cosas a su casa aun sin denuncia

Un agosto negro en violencia machista obliga a convocar un nuevo comité de crisis

Igualdad pide equiparar las ayudas por violencia machista y las del terrorismo

Comité de crisis de violencia de género

Comité de crisis de violencia de género / El Periódico

Patricia Martín

Patricia Martín

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dos de las siete víctimas mortales de la violencia de género del mes de agosto fueron asesinadas cuando iban a recoger sus enseres a sus casas, con el fin de romper definitivamente la convivencia con su agresor. Es una situación relativamente frecuente y por tanto un factor de riesgo. De ahí que el Ministerio de Igualdad haya planteado este lunes a las comunidades, la Fiscalía, Interior y Justicia, en el comité de crisis celebrado para analizar caso a caso los siete crímenes machistas, que se facilite a las mujeres un acompañamiento especializado cuando vayan a recoger sus pertenencias tras una ruptura sentimental con un maltratador, aunque no hayan interpuesto denuncia.

El ministerio reclama a Interior que retire la licencia de armas a aquellos hombres denunciados por violencia machista

Actualmente, es habitual que cuando la víctima presenta una denuncia y el juez decreta una orden de alejamiento, policías de paisano acompañen a ella o a él a recoger sus pertenencias a la vivienda en la que antes convivía la pareja, con el fin de evitar nuevos conflictos en el reparto de las cosas y más episodios de violencia machista. Se trataría de "institucionalizar" ese acompañamiento aunque la víctima no interponga una denuncia, por parte de los servicios especializados de apoyo a las víctimas o por parte de las policías locales, si tienen conocimiento de la situación.

La propuesta de Igualdad ha sido "bien acogida por las comunidades", según ha expuesto la delegada del Gobierno contra este problema estructural, Victoria Rosell, al término del comité de crisis. Asimismo, el ministerio capitaneado por Irene Montero ha vuelto a pedir al Ministerio del Interior que revise la política de tenencia de armas, dado que seis de los 40 asesinatos machistas de enero a agosto se han llevado a cabo con un arma de fuego. Y 153 crímenes desde 2003, aunque este procedimiento era más usado en violencia de género en los años 2000, cuando se inició la estadística de feminicidios, que ahora.

De hecho, actualmente las licencias de armas se deniegan a personas con antecedentes penales, de violencia de género o adicciones, pero Igualdad quiere que, aunque se hayan concedido, se retiren, de forma automática, a aquellos hombres que sean denunciados por violencia de género porque las estadísticas sobre su uso en maltrato hacia las parejas o exparejas son "preocupantes".

La revisión ya fue solicitada por Igualdad en junio, cuando se celebró el tercer comité de crisis destinado a analizar un repunte de violencia machista y aún está pendiente de ejecución. El Ejecutivo y las comunidades acordaron en julio de 2022 reunirse cada vez que en un mes se superen los cinco asesinatos, con todas las instituciones implicadas, y desde entonces se han celebrado cinco comités donde se han ido formulando diversas propuestas.

En el comité celebrado este lunes, además de analizar factores de riesgo como la recogida de enseres, el embarazo de la víctima o la licencia de armas, se ha puesto el foco en el perfil de algunas víctimas, con el fin de tratar de mejorar la respuesta institucional. Así, se ha planteado ampliar la mediación intercultural y que esta esté pendiente de las mujeres migrantes que pueden ser víctimas de maltrato o que los servicios de atención psicológica reciban especialización en violencia de género.

La propuesta de Igualdad es que "cualquier trabajador público" reciba formación en este ámbito para que "sea cual sea el acceso de una víctima a las instituciones públicas, se encuentre alguien preparado", en palabras de la secretaria de Estado, Ángela Rodríguez. Con esta medida se busca atajar uno de los principales problemas en la lucha contra este problema estructural y es que la mayoría de las afectadas silencian la situación y no interponen una denuncia. En agosto, por ejemplo, solo una de las asesinadas había acudido a la justicia.

Las víctimas de agosto

La primera víctima de la violencia de género del pasado mes fue una mujer de 27 años degollada por su marido Almería. En 24 horas, a este asesinato se sumaron dos más: el de una mujer de 31 años en Pozoblanco (Córdoba) y otra de 91 en Valle Guerra (Tenerife).

A los pocos días, en Madrid, otra mujer de 50 años fue asesinada por su marido, mientras que la quinta víctima fue una vecina de Motril (Granada) de 39 años. Las dos últimas mujeres se conocieron el miércoles, cuando una mujer de 36 años perdió la vida en el municipio salmantino de Béjar y otra de 58 fue asesinada por su exmarido en Alzira (Valencia).

A estos siete crímenes se suman dos mas que han tenido lugar el primer fin de semana de septiembre, lo que eleva el número de víctimas mortales a 42, 12 más que en el mismo periodo de 2022. El crecimiento se debe a que este verano ha sido especialmente funesto, con otros ocho asesintos el mes de junio.