Gestión de residuos

Las elecciones frenaron en algunos municipios el puerta a puerta, que no convence en las ciudades

Isaac Peraire: "El puerta a puerta es el método que da mejores resultados"

Catalunya se estanca en la gestión de residuos: más del 50% no se recicla

Reciclaje extremo: regar tomateras con el agua extraída de la basura

Recogida de basuras puerta a puerta en el barrio de Sarrià

Recogida de basuras puerta a puerta en el barrio de Sarrià / CARLOTA SERAROLS

Alex R. Fischer
Guillem Costa
Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Las elecciones municipales influyeron en la implementación del sistema puerta a puerta a la hora de recoger residuos. La ley obliga a lograr unos objetivos que de momento pueblos y ciudades no están consiguiendo. La Agència de Residus de Catalunya (ARC) no cierra la puerta a otros métodos, pero considera que el puerta a puerta es el sistema más eficaz.

La realidad, sin embargo, apunta a que en estos momentos el puerta a puerta apenas llega aproximadamente a un millón de personas. Más de 300 ayuntamientos, de los 947 que existen en Catalunya, han apostado por poner en marcha este sistema. Pero por lo general, se trata de pueblos pequeños, de pocos habitantes. La Generalitat considera que este sistema, así como la recogida selectiva en líneas generales, es la gran asignatura pendiente de las ciudades.

Según los datos de la plataforma Porta a Porta, existen 117 municipios que tienen previsto implantar este método de recogida de basura en los próximos meses. Entre ellos están Sant Celoni, Sant Iscle de Vallalta, Mont-roig del Camp, Tàrrega, Begues, Montmeló, Viladecavalls, Castellar del Vallès o Piera.

En la mayoría de estos municipios, tras el 28-M se han mantenido los mismos gobiernos municipales que estaban en el poder tras las elecciones de 2019. Es decir: si se analizan los resultados población a población, en líneas generales, los votantes no han castigado a los gobiernos que han aplicado el sistema puerta a puerta. El caso de Ada Colau en Barcelona, en concreto en el barrio de Sant Andreu, es una de las excepciones. En este distrito donde se ha probado este sistema, Colau sacó peores resultados que en 2019, cuando fue la primera fuerza. Ahora es la segunda, tras el PSC.

Vilanova y Sant Cugat

El problema, según apuntan fuentes de la ARC, es que en los últimos meses, ante la cercanía de las elecciones municipales, muchos pueblos pusieron el freno de mano y pararon estos proyectos. Como el puerta a puerta supone un cambio de hábitos para los vecinos de las poblaciones, responsables municipales optaron por esperar que pasaran las elecciones para ahorrarse polémicas y decidir después qué hacer con la recogida selectiva.

Dos casos de municipios con un número de habitantes importantes son Vilanova i la Geltrú y Sant Cugat. En estas dos poblaciones sí ha habido un cambio de gobierno, pero la reacción ante la implementación del puerta a puerta es distinta. En Vilanova, la alcaldía estaba en manos de ERC y no se llegó a poner en marcha este sistema de recogida. Ahora, el nuevo gobierno socialista todavía no ha tomado una decisión sobre qué hacer y están estudiando si retomarlo o no.

En Sant Cugat, en cambio, donde también ostentaba la alcaldía ERC, el nuevo gobierno liderado por Junts no va a cambiar de planes. El puerta a puerta, ya presente en Valldoreix, se va a testar en el principal barrio del municipio, el del centro. Fuentes del consistorio aseguran que en los próximos meses concretarán cómo se vehícula este nuevo sistema.