Reciclaje extremo: regar tomateras con el agua extraída de la basura

Las plantas de tratamiento de residuos tienen mucho margen de mejora. Algunos proyectos en marcha marcan el camino a seguir. Es el caso del programa 'Life infusion', financiado por la Unión Europea, que ha instalado una depuradora muy particular en una de esas plantas, en concreto en el Ecoparc 2 de Montcada i Reixac, del Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Su función es aprovechar los líquidos de los residuos para crear agua que aprovechen los agricultores.

Esta planta de tratamiento ya hace años que trabaja para aprovechar al máximo los residuos que llegan (sobre todo del contenedor marrón, el orgánico, y del gris, el de los restos). La basura se introduce en unos depósitos donde se acelera el proceso de descomposición que veríamos en nuestra casa si nos fuésemos de vacaciones sin llevar las bolsas al contenedor. Durante este procedimiento de digestión (que se lleva a cabo sin oxígeno), se produce biogás, un elemento que se puede vender para generar energía.

Ecoparc2, de los residuos urbanos obtiene energía, biofertilizantes y agua para regar

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Además, después de tratar ciertos nutrientes, de los residuos también se extrae sulfato y nitrato amónico (este último muy valioso para los agricultores). Estos dos elementos se comercializan para usarlos como fertilizantes y aprovecharlos en el campo.

Ahora, con la nueva depuradora del proyecto 'infusion', el Ecoparc 2 va un paso más lejos. Trasladan el líquido que sale de prensar los residuos hasta este nuevo aparato que salva el 66% del agua sucia para convertirla en agua regenerada. Es una depuradora mucho más eficiente que la que usan habitualmente en esta planta de tratamiento de residuos. "Pasamos de tener una depuradora destructiva a una constructiva", explica Glòria Sánchez, jefa del control de calidad en el tratamiento de los residuos de la AMB.

Prueba piloto

Esta agua se enviará al IRTA, el instituto de tecnología agroalimentaria del Departament d'Acció Climàtica, para que la use en el riego de tomateras, por ejemplo. Cuando la hayan probado, sabrán hasta que punto la calidad es óptima para utilizarla en otros cultivos.

La depuradora que produce esta agua regenerada se desmontará de Montcada i Reixac en poco tiempo. La trasladarán a Gijón, donde terminará este proyecto de cuatro años de duración.

"Lo que sería ideal es que en el futuro usáramos una depuradora eficiente como esta, que es mucho mejor que la que ya tenemos", explica Sánchez. Ahora mismo, las cuatro plantas de tratamiento de residuos de la AMB envían a vertederos una cuarta parte de las toneladas de basura que gestionan.

El objetivo es que este porcentaje se reduzca. ¿Y cuál es la fórmula mágica? Pues según los responsables, convendría que estos proyectos puntuales fueran una realidad. De esta forma, de todos los residuos recibidos, no solo saldrían biogás y fertilizantes, sino también esta cantidad de agua regenerada, que en tiempos de sequía vendría muy bien a los agricultores, en una situación cada vez más complicada.

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