La picaresca en los exámenes de competencias básicas de 4º de la ESO: De ChatGPT a Google Translate

Los más de 80.000 alumnos de cuarto de ESO catalanes han terminado este jueves la segunda jornada de las pruebas de competencias básicas con la realización de los exámenes de lengua extranjera y ciencia y tecnología. Unos exámenes que empezaron este miércoles con las pruebas de catalán, castellano y matemáticas y que este año planteaban varios retos.

El primero era concentrarse en las pruebas con la pantalla delante. Por primera vez los enunciados no han llegado a las centros impresos y en cajas de cartón, sino que los docentes los han descargado de una plataforma digital a las ocho de la mañana y los han distribuido vía Classroom entre los alumnos, que han leído el enunciado en pantalla y han respondido en papel (excepto los 4.000 alumnos de cuarto de los 59 centros que participaron en un prueba piloto completamente 'online').

El segundo, y más difícil, era mejorar los malos resultados de las últimas pruebas, que mostraron un descenso de la puntuación media en todas las materias, sobre todo en matemáticas (el curso pasado, el 22% de los estudiantes de cuarto no había adquirido los conocimientos básicos en la materia). Los resultados tardarán en conocerse, pero todas las miradas están puestas en confirmar si el bajón del último año fue un bache provocado por la pandemia o la preocupante situación -agudizada en los colegios que concentran a más alumnado vulnerable- se mantiene.

Control digital

Cuando desde el Departament d'Educació se anunció a los centros -casi en el último momento- la novedad del sistema híbrido (con el objetivo de imprimir menos), se les comunicó también que esto implicaba que los docentes deberían, además, "controlar que el alumno no consultara o buscara información a través de su ordenador". El conocimiento del centro de sus alumnos -y de los riesgos que esta nueva fórmula comportaba- hizo que se hiciera un intenso trabajo los días antes de concienciación entre el alumnado para que llevara los portátiles cargados. Pese a eso, entre las incidencias registradas, están los alumnos que no trajeron el portátil, los que lo trajeron descardo y los que no trajeron si quiera el cargador, lo que obligó a hacer copias impresas de los enunciados.

En algún caso ha habido también fallos intermitentes en el wifi -algo que suele pasar- y, aunque no ha sido algo generalizado, ha habido alumnos que no han podido evitar la tentación de intentar usar la tecnología para ayudarles en sus exámenes, teniéndola delante como la tenían. Este jueves -día de las pruebas de lengua extranjera- se ha cazado a alumnos tirando del Google Translate, y ayer se comunicó el caso de algún alumno pillado intentado usar ChatGPT, según han señalado desde la plataforma Coordinadors Digitals en Lluita, quienes pasaron una encuesta para recoger incidencias entre sus afiliados. Sobre qué hacer si pillaban a un alumno copiando, el criterio ha sido el mismo que se sigue en cualquier otra vez. Sentido común.

Algunos centros han visto también como alumnos boicoteaban las pruebas no presentándose al examen o, incluso, invalidándolas después de hacerlas.

La semana próxima, del 8 al 10 de mayo, será el turno de las competencias básicas de sexto de primaria.