Portátiles olvidados o sin batería y copiadas masivas: los peligros de los primeros exámenes 'online' de 4º de la ESO

Si alguien conoce la cada día más compleja realidad de las aulas son los profesores, que estos días andan inquietos ante las pruebas de competencias básicas que el alumnado de 4º de la ESO de toda Catalunya hará los próximos días 3 y 4 de mayo y que por primera vez serán en formato 'online'. Los docentes ya han advertido de las lagunas del plan del Departament d'Educació y de las incidencias que a buen seguro se producirán ese día, y que van desde ordenadores 'olvidados' en casa a portátiles sin batería (el pan de cada día en muchas clases), pasando por una caída del wifi (algo que sucede más a menudo de lo que imaginamos en una gran cantidad de centros) o una copiada más o menos generalizada por parte de los adolescentes, hábiles en el manejo de las tecnologías que permiten pasarse las respuestas por chat.

Qué ocurre finalmente se verá en unos días. Y no será lo único a lo que estar atentos: estas pruebas, que sirven para tomar la temperatura al sistema educativo catalán, son las que el año pasado arrojaron unos pésimos resultados, con descensos del nivel en todas las materias, algo que hizo que sobrevolara la idea de su desaparición, cosa que finalmente no se ha producido.

Además de la fecha exacta -se sabía que este año serían en mayo, pero no los días concretos-, la semana pasada el Departament d'Educació comunicó a los centros que las pruebas de competencias básicas de 4º de ESO se realizarán en "un formato híbrido". Los centros no recibirán los exámenes impresos como hasta ahora (para ahorrar papel, señalan fuentes oficiales). Una hora antes de la prueba, los institutos recibirán el PDF con las preguntas y los docentes serán quienes las distribuyan, vía Google Classroom o similar, entre los alumnos, que leerán las preguntas en pantalla, en su ordenador portátil (si lo traen y funciona), y responderán a mano en un folio, como hasta ahora.

Eso será así en la mayoría casos. Pero 59 centros participarán en una prueba piloto para realizar la prueba íntegramente 'online', preguntas y respuestas, según avanzó la semana pasada este diario. Estos exámenes totalmente 'online' los harán unos 4.000 estudiantes.

El profesorado está en alerta. Para empezar, porque "el wifi de muchos centro educativos presenta grandes deficiencias", señala Edith Garcia, portavoz de la plataforma Coordinació Digital de Catalunya en Lluita, que apuntan también a cuestiones que a priori pueden resulta superadas, pero que la experiencia les hace temer, como problemas para descargar los PDF. Si la prueba piloto sale bien, la perspectiva es que se implante al conjunto del alumnado.

Estas pruebas han sido a menudo criticadas por docentes considerar que vienen "desde arriba" --son exámenes externos, organizados y corregidos por personal ajeno a los centros-- y no pueden participar en ellas para nada. La excepción, otra novedad de este año, son las pruebas orales de catalán, que las tuvieron que coordinar y evaluar los docentes de cada centro.

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