Educación en Catalunya

De 'escape rooms' a talleres sobre 'fake news': las mil vidas de la biblioteca escolar

El instituto Menéndez y Pelayo de Barcelona es uno de los pocos centros públicos catalanes con una biblioteca escolar abierta cada día y gestionada por una bibliotecaria profesional, pagada por las familias

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A1-171312438.jpg / GEORGINA ROIG

Helena López

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Son casi las 12 del mediodía y el sanador sol de primavera entra por los grandes ventanales que dan al pequeño patio. Acaba de terminar la hora del recreo y la biblioteca -hace unos minutos a rebosar- se ha vaciado; aunque todavía quedan unos pocos jóvenes estudiando en un par de mesas redondas. La entrada de estudiantes para hacerle alguna consulta a Júlia Baena, la bibliotecaria escolar del barcelonés instituto Menéndez y Pelayo, es un goteo constante. Toda empatía, Baena les atienda con una sonrisa generosa y toma nota de sus peticiones, de lo más variopinto, como lo son el abanico de temas de los Treballs de Recerca (TR). Una de las (muchas) funciones de la biblioteca(ria) escolar es asesorar individualmente en la búsqueda, la evaluación y el uso de información para trabajos y deberes a todo el alumnado.

El Menéndez y Pelayo es uno de los poquísimos institutos públicos catalanes que tiene una biblioteca escolar con una bibliotecaria profesional al frente -arraigadísima al funcionamiento del centro- y la muestra de que no solo es posible, sino muy necesario, por su impacto en el rendimiento académico del alumnado (algo en lo que todo el mundo coincide, aunque los medios no lleguen y cada día se cierren bibliotecas por falta de recursos o tiempo). En el caso del Menéndez y Pelayo, el proyecto se mantiene vivo por la implicación de todo el equipo de docentes y de las familias: es el afa quien paga.

De Sally Roonie a Stephen King

En la puerta de acceso de esta histórica biblioteca [el edificio que hoy alberga este instituto, inaugurado en 1932 como Mutua Escolar Blanquerna, ya contaba con este equipamiento pedagógico] hay un tablón sembrado de papelitos de colores. Bajo el cartel 'Recoma'ns un llibre', propuestas escritas a mano con letra de adolescente que van desde 'On ets món bonic?', de Sally Roonie hasta 'Harry Potter 3'. De ‘El noi del vestit’ de David Walliams a 'Después del anochecer' de Stephen King. No es lo mismo un crío de primero de ESO que uno de segundo de bachillerato, pero aquí conviven, leen, aprenden y comparten saberes todos.

En esta biblioteca conviven chavales que buscan la tranquilidad en sus agradables sofás a la hora del patio ya sea para leer libros como para deslizar el dedo sobre su móvil -estamos en el 2023 y este lugar es excepcional, pero no otro planeta-, hasta jóvenes que juegan a ajedrez o a hundir la flota o se documentan para hacer su TR.

Más allá de todo lo que pasa aquí a la hora del patio, la integración de la biblioteca en el centro es total y aflora en infinidad de detalles. Desde apasionados clubes de lectura con las lecturas obligatorias hasta los paseos de Baena con el carrito por el pasillo al grito de "¡libros para vacaciones!", los 'escape room' para formar a los usuarios sobre cómo moverse en este tipo de equipamientos hasta las cada vez más imprescindibles formaciones sobre 'fake news', que imparte también la propia Baena.

Dentro y fuera

Esta sala de 100 metros cuadrados con una larga pared forrada con 7.000 títulos está abierta todos los días, de 10 de la mañana a dos de la tarde, y en ella, además de compartir secretos en voz bajita -pasan muchísimas cosas, pero esto es una biblioteca- se crean proyectos que muchas veces traspasan los muros del colegio. Colaboran activamente con el barrio, el distrito y la ciudad. Los alumnos de primero de ESO, por ejemplo, participan en el maratón de lectura anual que organiza el distrito, y en la recogida de libros infantiles para la campaña anual 'Cap infant sense joguina' de la Creu Roja Barcelona.

Además, en el marco de los proyectos de centro, el 'insti' ofrece un Servicio Comunitario de Biblioteca con varios equipos de trabajo: de fomento de la lectura a espacios literarios.

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