Nueva sociedad científica

Un conjunto de profesionales se alían para combatir las enfermedades crónicas

Médicos, fisioterapeutas, farmacéuticos y psicólogos crean, junto a varias asociaciones de pacientes, la Sociedad Española de Atención a las Personas con Enfermedades Crónicas

Un paciente de cáncer se somete a una prueba médica

Un paciente de cáncer se somete a una prueba médica

O. Pereda

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Más de 22 millones de personas, cerca de la mitad de la población española, sufre enfermedades crónicas, patologías de larga duración y, en general, de progresión lenta. Por ejemplo, las dolencias cardiovasculares y pulmonares, algunas psiquiátricas, la diabetes o el cáncer.

Más de 22 millones de personas, cerca de la mitad de la población española, sufre enfermedades crónicas, patologías de larga duración y, en general, de progresión lenta

La complejidad que supone tratar a estos pacientes ha llevado a un grupo de profesionales sanitarios y sociosanitarios, junto con asociaciones de pacientes, a unirse para colaborar en su atención global. La Sociedad Española de Atención a las Personas con Enfermedades Crónicas (SEAPEC), que ha emitido hoy su primer comunicado, se define como “una sociedad científica multidisciplinar” que tiene por objetivo “abordar la difícil situación de la cronicidad en España, tanto de los pacientes como de sus cuidadores” para ofrecer “una asistencia integral y continua que mejore su calidad de vida”. Entre sus miembros, además de los propios pacientes, hay profesionales de la medicina, la enfermería, la farmacia, el trabajo social, la fisioterapia y la salud mental.

El impacto de la pandemia

La pandemia, y la saturación de la atención primaria, agravó la situación de muchos de estos pacientes, que tuvieron que ingresar en un hospital dado que su control médico rutinario quedó trastocado. Las patologías crónicas representa el 80% de las consultas de atención primaria y en torno al 60% de los ingresos hospitalarios. Es la primera causa de gasto sanitario y, en más del 90% de los casos, también la principal causa de muerte. Entre los mayores de 65 años, la proporción de afectados por las enfermedades crónicas asciende al 90%.

Los especialistas detectan que los pacientes se han aleado del sistema sanitario debido, entre otras causas, a la reducción de la atención domiciliaria y las citas presenciales. “Esta situación ha generado un desencanto en los pacientes que, en muchos casos, han desatendido también el control de sus enfermedades. Los datos confirman un incremento de mortalidad que se podría haber evitado con los cuidados adecuados”, explica Jimena García, farmacéutica y secretaria de SEAPEC. 

"Los datos confirman un incremento de mortalidad que se podría haber evitado con los cuidados adecuados"

— Jimena García, farmacéutica y secretaria de SEAPEC

En la misma línea, Juan Torres, presidente de la nueva sociedad y jefe del servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario Infanta Leonor-Virgen de la Torre (Madrid), añade que, dado que las urgencias están saturadas y la atención primaria debilitada, se están produciendo “ingresos y reingresos de pacientes crónicos, que están peor controlados”. 

A esta situación, además, se une la actual desmotivación de los profesionales de la salud por sus condiciones laborales y personales, que acaba impactando también en el paciente. “Estamos desbordados y no queda hueco para reiniciar el programa de atención crónica, prevención y promoción, que es nuestro fundamento”, agrega Luis ndo, vicepresidente de SEAPEC, médico de familia y director del centro de salud de Cascante (Navarra).

“La cronicidad está fragmentada y se necesita coordinar todo de forma simultánea, no solo lo sanitario, sino también lo social, lo farmacológico, la salud mental y la fisioterapia"

— Luis Mendo, médico de familia y vicepesidente de SEAPEC

“Queremos hacer cambios e integrar a todas las disciplinas sanitarias y sociosanitarias que atienden a los pacientes crónicos con el fin de colaborar y de compartir experiencias y realidades diferentes, identificar fallos en la atención y derribar barreras y prejuicios para acometer acciones transversales”, explica la farmacéutica García. “La cronicidad está fragmentada y se necesita coordinar todo de forma simultánea, no solo lo sanitario, sino también lo social, lo farmacológico, la salud mental y la fisioterapia”, insiste el doctor Mendo.

La sociedad inicia hoy su andadura con cuatro líneas de trabajo: prevención y promoción de la salud, adherencia terapéutica y empoderamiento del paciente, continuidad asistencial y apoyo de la tecnología. El primer paso será la organización, el próximo mes de septiembre, de unas jornadas de análisis sobre la situación de la cronicidad en España. Más adelante, se aprobará un proyecto de colaboración con la Universidad Complutense para formar a sus alumnos en el control de la hipertensión.