Tiene antecedentes

La jueza envía a prisión al conductor que mató a los ciclistas por "su desprecio a la vida de los demás"

Le acusa de un delito de conducción temeraria, dos contra la vida, cuatro contra la vida en grado de tentativa y otro más de conducción sin permiso

Pasa a disposición judicial el detenido por el atropello mortal de un grupo de ciclistas en Castellbisbal

Pasa a disposición judicial el detenido por el atropello mortal de un grupo de ciclistas en Castellbisbal / Jordi Pujolar/ACN

Guillem Sánchez

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La jueza titular del juzgado número 5 de Rubí (Vallès Occidental) ha decretado esta tarde prisión provisional para el conductor que fue detenido el pasado domingo día 21 como presunto autor del atropello múltiple de ocho ciclistas en Castellbisbal, dos de los cuales fallecieron y un tercero permanece en estado crítico.

En concreto, la jueza le acusa de un delito de conducción temeraria, dos delitos contra la vida, cuatro delitos más contra la vida en grado de tentativa y otro más de conducción sin permiso. En un contundente auto de prisión, la togada subraya que la investigación de los Mossos d'Esquadra concluye que el detenido embistió a las víctimas "infringiendo las normas básicas de circulación". Según el atestado, conducía "a una velocidad superior de la prevista para este tipo de vía, con síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos de las drogas y sin permiso de conducir". Y, "sin ningún motivo aparente", invadió el carril contrario, por donde circulaban los ciclistas, a pesar de que es un tramo donde está prohibido adelantar.

La jueza destaca también que tras haber colisionado, y de los "gravísimos resultados de su actuación", el conductor "se dio a la fuga sin interesarse por el estado de los perjudicados y sin socorrer a los mismos". Este gesto denota, para la jueza, el "absoluto desprecio por la norma así como por la vida e integridad ajenas" del arrestado: "abandonó el lugar del accidente con conocimiento de la elevadísima probabilidad de haber matado a alguno de los ciclistas". Por si no bastara con lo anterior, en el escrito se subraya asimismo que este sospechoso, que ha reconocido ser el conductor del vehículo siniestrado y sobre el que pesan múltiples indicios como cámaras de seguridad o testimonios, circulaba el domingo ignorando dos condenas de tráfico que le prohíben coger el coche.

Por los motivos anteriores, además del riesgo de fuga que la jueza también aprecia en este caso, el auto de prisión sostiene que para evitar la reiteración del delito, y mantenerlo lejos de la carretera, la prisión preventiva es la medida oportuna. Lo argumento remarcando que ha quedado demostrado que las sanciones de tráfico que disuaden el resto de conductores no sirven con él porque ha seguido conduciendo. Y que no vuelva a conducir es primordial puesto que al hacerlo pone en riesgo la integridad de las demás personas.

Prisión preventiva

El detenido, un hombre de 41 años de edad, vecino de Martorell y con antecedentes, ha pasado dos noches en la comisaría de Rubí y este martes ha sido conducido al juzgado pasadas las 13.00 horas. Tras tomarle la declaración, la jueza de Rubí lo ha mandado a la cárcel sin fianza hasta que se celebre el juicio que le espera por matar a dos ciclistas, dejar en estado crítico a un tercero y herir a otros dos.

Desde el banquillo de acusados, deberá explicar también por qué, tras arrollar al grupo de ocho ciclistas, se dio a la fuga sin auxiliar a las víctimas ni llamar a los servicios de emergencias para que las atendieran. No fue posible dar con él hasta casi doce horas más tarde, cuando los Mossos los arrestaron en Martorell, después de que el coche que conducía fuera hallado en esa localidad con los cristales delanteros destrozados.

Este es uno de los accidentes más graves en los que se han visto implicados ciclistas en Catalunya. Ocurrió poco antes de las 11.00 horas del domingo día 21 en la C-243c, en el punto kilométrico 0,5, a la altura Castellbisbal. Fallecieron dos hombres de 66 y 72 años de edad y vecinos de Rubí. Un tercero permanece ingresado en estado crítico en el hospital de Bellvitge.