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Museos, parques y ocio: Madrid despliega su oferta para esta Semana Santa

Ociosa, vírica y con buen tiempo, la capital despliega sus joyas pero no se puede bajar la guardia por el covid

Parque del Retiro

Parque del Retiro / periodico

El Periódico

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Semana Santa en Madrid. Ociosa, vírica y con buen tiempo aunque existe amenaza de lluvias entre el jueves santo y el domingo 4 de abril. La primavera ha llegado y parques como El Retiro, el Campo del Moro o jardines como el del Botánico lucen espectaculares. Las rutas ‘bicicleteras’ llaman a la exploración. Museos admirados en todo el mundo, abiertos. Tentadoras torrijas luciendo ya en escaparates pasteleros con pedigrí e historia castiza. Pueblos de la comunidad reconocidos por la UNESCO por su belleza o tesoros arquitectónicos, esperando. Las posibilidades y planes para disfrutar la vida callejera, el ocio, la oferta cultural y gastronómica que ofrece esta autonomía -con cierre perimetral hasta el 9 de abril- son inmensas. Más que en un 2020 sorprendido por un confinamiento total y abrupto.

Pero también han de ser inmensas las precauciones a tomar en un territorio especialmente castigado por el Covid. Sus ratios de incidencia son peligrosos: El número de infectados superaba los 618.000 en el arranque del periodo festivo con tendencia al alza, según datos del ministerio de Sanidad. Se puede por tanto disfrutar de estos días de ‘pasión’ en avenidas y plazas, sedes culturales, restaurantes y bares madrileños, aunque con restricciones y conociendo qué se puede hacer y qué no para no ponerse ni poner a nadie en riesgo. 

Aquí el toque de queda se ha ampliado hasta las 23 de la noche, aunque la restauración –se recomienda reservar- no puede admitir más clientes a partir de las 22 horas. Sí se puede demandar servicios de entrega a domicilio hasta medianoche. En cuanto a los aforos máximos, la regla general es permitir el 50 por ciento del habitual a fin de garantizar distancias y, a partir de ahí, marcar pautas por sectores. En lo que atañe a la gastronomía, en los interiores sigue siendo de cuatro el número máximo de comensales por grupo, mientras que en las terrazas permanece el máximo de seis personas por mesa. Y cuidado con no olvidar la mascarilla, obligatoria tanto dentro como en la terraza de los restaurantes. Solo está permitido retirarla cuando se vaya a comer y beber.

Cuidado también con las citas en domicilios particulares, que no están recomendadas y tienen sus propias reglas: nunca más de cuatro y evitando las que no atañen a núcleos de convivencia. Las Fuerzas de Seguridad tienen directrices de vigilar no sólo el respeto a los cierres perimetrales y las normas para llegar por aeropuerto, tren o carretera (a los numerosos franceses que vienen en coche también se les solicita ahora PCR negativa), sino también que no haya fiestas clandestinas en inmuebles particulares.