Detenido en Francia por la muerte de un joven hallado en un contenedor en Empuriabrava

Las autoridades francesas han detenido en Francia a uno de los fugitivos por el crimen del joven hallado muerto en un contenedor en Empuriabrava  joven hallado muerto(Alt Empordà) el 26 de abril del 2013. En enero de 2016, la Audiencia de Girona juzgó y condenó a 13 implicados en los hechos por delitos de obstrucción, tenencia ilícita de armas y encubrimiento, pero los supuestos autores materiales del crimen estaban evadidos de la justicia.

Según fuentes cercanas a la investigación, el juzgado dictó dos órdenes de detención y entrega y ahora las autoridades francesas han arrestado uno de los sospechosos, Jamal T. En concreto, según las mismas fuentes, se trata del hombre que alquiló el inmueble de Castelló d'Empúries que la investigación sitúa como la escena del crimen. El sospechoso pasará a disposición judicial cuando el extraditen. Queda por detener otro fugitivo, Malek G. Su huella apareció en la bolsa de basura donde estaba el cadáver.

El caso se remonta a abril del 2013, cuando una vecina que iba a tirar la basura encontró el cuerpo de un joven en un contenedor situado en la calle Medes de Empuriabrava. El chico, de 23 años y origen marroquí, apareció degollado. Le habían asestado hasta 17 cuchilladas y el cuerpo tenía signos de haber sido torturado. El caso requirió una amplia investigación policial y las detenciones se produjeron un año después de los hechos.

Un clan marsellés

En marzo del 2014, los Mossos, en colaboración con la policía francesa detuvieron a 14 delincuentes vinculados a una organización criminal dedicada al tráfico de droga a escala internacional que, según concluyeron los investigadores, estaba detrás de la muerte del joven. A algunos de los arrestados se les consideraba miembros de un clan marsellésclan marsellés.

En enero del 2016, un total de 13 imputados se sentaron en el banquillo de la Audiencia de Girona. Las diferentes defensas y el fiscal pactaron penas de entre 8 meses y 4 años de prisión para los sospechosos como encubridores del crimen. La pena más alta fue para uno de los arrestados, a quien condenaron por obstrucción a la justicia, tenencia ilícita de armas y encubrimiento.

La investigación situó la escena del crimen en el garaje de un inmueble de Castelló d'Empúries donde, según recogía el escrito de acusación del fiscal Enrique Barata, "dos o más personas" torturaron y mataron a la víctima provocándole "sufrimientos inhumanos". El detenido este fin de semana es, precisamente, quien había alquilado la vivienda donde estaba el garaje. Según las mismas fuentes, el detenido pasará a disposición judicial una vez las autoridades francesas la extraditen.