El 'boom' inmersivo en Barcelona: desde restaurantes hasta conciertos

En cuanto entras en el restaurante, te topas con un escenario que parece sacado de una secta de ciencia ficción: luces apagadas y platos brillantes como si fuese una bola de cristal lista para hacerte de oráculo. “Aquí cocina el chef más pequeño del mundo”, te promete el maestro de ceremonias mientras cruzas unas cortinas opacas llenas de misterio. ‘Le Petit Chef’, le llama. Un cocinero de apenas seis centímetros. Lo primero que te viene a la cabeza es Ratatouille de Disney. ¿Tendrán ratas en la cocina?

Cuando están todos los comensales aposentados, empieza el espectáculo. La mesa cambia de color, con imágenes variadas, dinámicas y llenas de vida. Suena una música y, frente a ti, se te presenta: Le Petit Chef, una proyección que te guía durante las cenas inmersivas que organiza Terrum, restaurante del hotel Hyatt Regency Barcelona Tower (Gran Vía de L’Hospitalet, 144, L’Hospitalet de Llobregat).

Un concierto con gafas inmersivas: la tentación de que el 'show' sea en tu casa

La idea de estas cenas es jugar con los sentidos. Obviamente con el gusto, pero también con la vista, con el oído y con el olfato. Las animaciones, proyectadas desde el techo directamente hasta cada una de las mesas, interactúan con el plato y te cuentan una historia. Además, el uso de sonidos, música y hasta olores hacen que te sumerjas más en el relato. 'Spoiler alert': hay un momento en el que estás comiendo langosta mientras la mesa se ha convertido en un océano y te acompañan sonidos de alta mar. Te entran ganas de pedirle perdón a la Sirenita en cuanto salgas de ahí. 

La propuesta de Terrum, estrenada en diciembre, es uno de los últimos planes que se unen a la cargada agenda de las experiencias inmersivas, la última y omnipresente moda en el área metropolitana de Barcelona. Además de restaurantes —Terrum no es el único inmersivo, NÜA Smart Restaurant (Gran de Gràcia, 167, Barcelona) también ofrece desde hace años una experiencia interactiva en sus mesas ‘smart'— hay exhibiciones, cines y hasta conciertos. 

En cuanto a arte, acaba de arrancar la exposición ‘Sorolla, una nueva dimensión’ en el Centre d'Art Amatller (paseo de Gràcia, 41, Barcelona). Adéntrate en los cuadros del mítico pintor del Mediterráneo a través de imágenes en movimiento, proyecciones inmersivas y tecnologías sensoriales. 

El epicentro del arte inmersivo en Barcelona es el Centre d’Arts Digitals Ideal (Doctor Trueta, 196-198, Barcelona), que ahora está sumergido en una experiencia que, para mayor disfrute, debe hacerse con gorro de explorador y látigo a lo Indiana Jones: consiste en un viaje al pasado, al imperio de Tutankamon. Ideal, además, está probando con nuevos formatos inmersivos: los conciertos. Una experiencia sensorial donde, guiadas por la música y el ritmo, decenas de imágenes y proyecciones ofrecen constantes estímulos para hacerte viajar más allá de tu cuerpo. El plan ideal para la sobreestimulada generación TikTok. Por su escenario han pasado los cantantes Maria Arnal y Triquell, y del 21 al 24 de febrero es el turno de la pianista y compositora Laura Andrés, que presentará su último álbum, ‘Venus’. Un viaje inmersivo al espacio a ritmo de piano.

"Pondrá a prueba todos los límites": las claves del 'boom' de la cultura inmersiva

Volviendo a L’Hospitalet, aquí hay aventuras inmersivas en la gran pantalla: los Cines Filmax Gran Via 4DX (Gran Via 2, Granvia de l’Hospitalet, 75, L'Hospitalet de Llobregat) son los únicos cines en Catalunya con tecnología 4DX, y los únicos en el mundo con tres salas 4DX y una Screen X, pensada para el cine inmersivo. ¿No te suena el 4DX? Es la evolución del 3D. Aquí no solo son las imágenes las que intentan salir de la pantalla, también la temperatura y la meteorología. En total, una veintena de efectos sincronizados con lo que pasa en pantalla: copos de nieve, ráfagas de viento helado, gotas de agua e incluso, estimulación olfativa. Una película de Marvel aquí y te tienes que ir directo a la peluquería.