La ANC se da tres meses para decidir si impulsa una lista para las elecciones al Parlament

Tres meses. Este es el tiempo que se ha dado la ANC para decidir si impulsa una "lista cívica" de cara a las elecciones del Parlament, que no tienen fecha, pero que serán como muy tarde en febrero de 2025. Así lo ha explicado este viernes la presidenta de la entidad, Dolors Feliu, en un mensaje para hacer balance del año publicado en las redes sociales. Allí ha anunciado que "en el primer trimestre" de 2024 la Assemblea someterá la decisión a votación de sus socios. Es una decisión es importante, ya que si finalmente impulsa una candidatura, fragmentará el espacio independentista y sumará una oferta electoral más al lado de Junts, la CUP y ERC. Y ahora mismo es impredecible qué impacto podría tener.

Feliu ha dejado claro en más de una ocasión que ella sí es partidaria de impulsar esta cuarta lista independentista, como lo fue su antecesora en el cargo, Elisenda Paluzie. Su argumento es el "inmovilismo" de los partidos tradicionales, a quienes acusa de no estar haciendo nada por la independencia de Catalunya. El objetivo de la candidatura sería buscar un "nuevo embate" contra el Estado en el que "las instituciones y las movilizaciones en la calle vayan juntas" otra vez.

Si cristalizara esta opción, la ANC y su lista se erigirían como la candidatura que busca aglutinar al independentismo descontento con los partidos actuales, a los que reprocha haber dejado de lado la lucha por un estado propio. De hecho, el mensaje de Feliu de este viernes es muy crítico hacia ellos porque "han cambiado de objetivos" y han optado por "investir a un president español". Eso es la decisión de ERC y Junts de facilitar la investidura de Pedro Sánchez.

Feliu ha detallado que esta cuarta lista se crearía como "agrupación de electores", una opción que da la normativa electoral para concurrir a las elecciones y que se utiliza, sobre todo, en los comicios locales. Al partir de cero, tendría muchas menos ventajas que los partidos que ya tienen representación ahora. Sin embargo, podría presentarse como una opción libre hipotecas del pasado en un momento de división sobre donde tiene que ir el 'procés'.

Los obstáculos

Pese a la determinación mostrada por Feliu, los precedentes dicen que no tendrá fácil conseguir un aval de los socios para impulsar esta candidatura. Hay varios precedentes que lo demuestran. Primero, que la entidad tuvo que sobreponerse a una crisis interna precisamente cuando se intensificó el debate interno sobre presentarse a las elecciones al Parlament. Además, hay agrupaciones territoriales como la de Girona que ya han manifestado su rechazo. Segundo, que los socios ya han dado algún revolcón a la dirección en votaciones internas. Por ejemplo el pasado mes de julio, cuando rechazaron que la entidad promoviese la abstención en las elecciones generales, que es lo que quería Feliu.

Si acaban presentando la cuarta lista, se abrirán varias incógnitas. Por ejemplo, qué posibilidades reales tendría una operación así de entrar en el Parlament y de hacerlo con fuerza. También si minará las expectativas electorales de los tres partidos independentistas tradicionales, o solo de los que, como la ANC, son más partidarios de la vía unilateral. Finalmente, y la más importante, si esto fragmentará aún más este espacio ideológico y lastrará sus posibilidades electorales.

Vía unilateral

Se presente o no, Feliu ha vuelto a erigir a la entidad como la gran defensora de la "vía unilateral" hacia la independencia, la "única" para conseguir este objetivo y la que les ha acabado convirtiendo en una "entidad incómoda" para "el sector del independentismo próximo a los partidos". Este es un factor clave a tener en cuenta: el deterioro de las relaciones de la entidad con los partidos hasta el punto que, por ejemplo con ERC y el Govern, están prácticamente rotas.

La presidenta de la ANC ha querido acabar el año enviando un mensaje de optimismo a los socios asegurando que el proyecto independentista sigue siendo viable porque "solo depende de nosotros". Además, ha defendido haber "recuperado el pulso en las calles". "Con fuerza y convicción lo podemos todo", ha dicho.