Elecciones generales 2023

Los Comuns argumentan que aceptar a Vestrynge en su lista es un acto de "generosidad" con Podem

Lilith Verstrynge, la madrileña que va de número 4 de Podemos en Barcelona

Podemos dice ahora que "firmó sin acuerdo" la coalición con Sumar tras la "amenaza" de Yolanda Díaz

Jaume Asens, con Candela López y Jéssica Albiach, durante el consejo nacional de Catalunya en Comú el pasado fin de semana

Jaume Asens, con Candela López y Jéssica Albiach, durante el consejo nacional de Catalunya en Comú el pasado fin de semana / ACN

Sara González

Sara González

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Un acto de "generosidad" con Podem Catalunya para priorizar la "unidad". Así argumentan los Comuns por qué llevarán de número cuatro en su lista para las elecciones generales a la secretaria de organización de los morados a nivel estatal, Lilith Vestrynge, una dirigente de Madrid. Han esquivado, sin embargo, entrar a valorar el veto a la ministra de Igualdad, Irene Montero, de quien la líder de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, dijo que debería ser incluida en la candidatura si ella tiene voluntad de presentarse.

El portavoz del espacio en Catalunya, Joan Mena, se ha escudado en que el partido va a priorizar "no hablar más de partidos ni de listas" para evitar pronunciarse sobre las discrepancias internas que marcaron la semana pasada hasta la firma de la confluencia con Sumar el viernes. El objetivo es dar carpetazo a las batallas domésticas, también en territorio catalán -donde Podem amenazó con no implicarse en la campaña por excluir a Montero- y centrar el mensaje en el proyecto. Aún así, En Comú Podem está aún a expensas de oficializar si Jaume Asens repetirá o no como cabeza de lista, así como de diseñar sus candidaturas, por lo que de listas tendrán que hablar de forma inevitable en los próximos días, además de convocar un consejo nacional para validarlas.

En En Comú Podem son conscientes del lastre que las disputas internas suponen para la imagen de Sumar cuando falta un mes y medio para que los ciudadanos pasen por las urnas y ante el reto de la izquierda de movilizar a sus votantes. "No ha sido fácil y se ha hablado más del quién que del qué, pero finalmente se ha conseguido el acuerdo", ha intentado poner en valor Mena, que ha añadido que la unidad de la izquierda es "un punto de partida ilusionante pero no el final del camino".

Con vocación de intentar pasar página a la imagen proyectada en la recta final de las negociaciones, los Comuns piden ahora en centrarse en el reto electoral: "A partir de hoy, nos dedicaremos solo a hablar del modelo de país. El 100% de nuestro tiempo estará dedicado a hablar de propuestas". Queda lo más difícil: sumar a toda la ciudadanía que quiere salir adelante".

Mena ha recordado que lo que pretenden la derecha y la extrema derecha es derogar los avances del Gobierno del PSOE con Unidas Podemos e ir "en contra de los territorios como Catalunya", motivo por el que ha reclamado el "voto útil" para su espacio. Justamente, el mismo "voto útil" que piden los socialistas. De hecho, desde el PSC, que vienen de aprobar sus candidaturas este fin de semana con el tridente que forman la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, y los ministros Miquel Iceta y Raquel Sánchez, han esbozado las elecciones generales como una contienda entre el PSOE y el PP, por lo que romper esa dicotomía será otro de los retos que Sumar tiene por delante.