Trias ignora la presión del sector afín a Laura Borràs y rechaza lucir la marca Junts

Tanto Xavier Trias, candidato a la alcaldía de Barcelona, como la dirección de su partido, Junts per Catalunya, han decidido hacer caso omiso a las quejas del sector afín a la presidenta de la formación, Laura Borràs, sobre la estructura y la estrategia de esta candidatura. Unas quejas basadas en denunciar que en su campaña electoral esconde el mensaje independentista, que las siglas de la formación han desaparecido y que la lista que acompaña al candidato es autonomista y recuerda a la antigua Convergència i Unió. Nada de todo ello halla respuesta en Trias, que mantiene invariable su plan de aglutinar sectores diferentes para batir a la alcaldesa, Ada Colau, y hacer una campaña absolutamente a su medida.

"No estamos en la lista, no participamos en la campaña, no se nos tiene en cuenta", denuncian en privado los afines a Borràs. La batalla lleva meses librándose entre bambalinas. Primero intentaron colocar a distintos nombres en la lista de Trias. En paralelo, reclamaron poder diseñar la estrategia y el programa de forma conjunta. No han conseguido nada de ello. Al contrario, la lista del candidato ha sido -como él mismo ha aseverado- una decisión personal para colocar a personas de su máxima confianza que no le generen después "disgustos" en el Ayuntamiento. Es decir, que no le cuestionen la estrategia.

En cuanto a esto, los críticos de la Federación de Barcelona han reclamado que se visualice la marca JxCat y que el mensaje independentista no se esconda. Pero Trias hará una campaña bajo el lema "Trias per Barcelona" y Junts no aparecerá en la papeleta electoral. Y en cuanto a la independencia, los discursos del candidato no hacen hincapié en ella.

"Con el machete en la boca"

La situación interna es tensa por parte de los fieles a Borràs mientras que tanto Trias como los miembros destacados de su lista, así como la cúpula del partido, evitan alimentar la polémica y hacen oídos sordos a las quejas. Alguna, en público, como la de la dirigente fiel a Borràs y secretaria segunda de la Mesa del Parlament, Aurora Madaula, que en una entrevista en Vilaweb dijo que la lista de Trias "no representa lo que es Junts". Unas palabras muy criticadas internamente. Tanto Madaula como otros cargos locales han hecho llegar su malestar porque, a su juicio, existe una falta de representatividad.

La respuesta, el silencio. "Van a arrasarnos, ahora la guerra es abierta, con el machete en la boca, pero a nivel público lo guardamos", confiesa un cargo local crítico, que cree que tras las elecciones, esta tensión ahora contenida estallará en la primera asamblea que celebre Junts en Barcelona.

Con todo, siguen existiendo algunos puentes, precarios, en los que se abordan las discrepancias. Pero Trias, con el apoyo incondicional del secretario general, Jordi Turull, está ejecutando lo que ya advirtió cuando aceptó volver a ser candidato: quién decidirá sobre estrategias, alianzas, candidatura y estilo de campaña será solo una persona, él mismo.

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