ERC y JxCat atacan la fase definitiva de la negociación entre recelos

La petición explícita del candidato de ERC a presidir la Generalitat, Pere Aragonès, de que los negociadores de los partidos independentistas aceleren en favor de un acuerdo de Govern parece que no va a tener por el momento traducción concreta. Junts per Catalunya y los republicanos aseguran que todavía no se puede hablar de la composición del Govern, porque previamente ha de cerrarse la agenda gubernamental. Además, los de Junts han puesto sobre la mesa dos cuestiones nada amables en relación a los republicanos: cambiar el reglamento del Parlament para facilitar la situación jurídica a Laura Borras y cuestionar la figura del propio Aragonès, en el dietario del 'expresident' Torra que este lunes ve la luz, en pleno proceso para restablecer, se supone, las confianzas entre las dos principales fuerzas independentistas.

La formación del 'expresident' Carles Puigdemont mantiene el mutismo sobre las conversaciones con los republicanos. Pero mantienen la tensión. El fin de semana, Borràs ha aprovechado apariciones mediáticas en el diario Ara y en TV-3 para cargar contra su antecesor en la presidencia del Parlament, el republicano Roger Torrent, y para poner sobre la mesa un cambio del reglamento de la Cámara para que su situación procesal -está investigada por corrupción por su gestión al frente de la Institució de les Lletres Catalanes- no afecte a su nuevo cargo. Se trataría de no poder suspender a un diputado o diputada al que, por delitos vinculados con la corrupción, se le abra de forma "firme" un juicio oral. ERC, que abandera la lucha contra la corrupción, tiene este envite sobre la mesa. Por su parte, el 'expresident' Torra, también lanza un dardo a los republicanos al calificar de "pasiva" la actuación del vicepresidente Pere Aragonès durante la gestión de la pandemia. Torra, también en TV-3, también acusa al candidato a sucederle de no haberle tenido en cuenta durante los meses posteriores a la inhabilitación.

Pese a ello, Junts mantiene oficialmente un mensaje de mano tendida a la negociación con ERC "sin voluntad de polemizar", según la portavoz Elsa Artadi, que justifica la reforma del reglamento del Parlament por la necesidad de modernizarlo en cuestiones como la igualdad de género o el pacto antifascista así como las investiduras telemáticas y la voluntad de "perservar los derechos de los diputados". "No tenemos cerrada la reforma del reglamento", admitió Artadi preguntada sobre si ERC validaba la propuesta de Borràs sobre las imputaciones y la corrupción.

La diana de todos

“Todo el mundo nos critica, pero nosotros no vamos a criticar a nadie”. Así resumió Marta Vilalta la retahíla de dardos que, sobre todo, JxCat, pero también los ‘comuns’, han lanzado a los republicanos en los últimos días. 

Los ataques y ‘olvidos’ de Laura Borràs y Quim Torra, con todo, son tomados con pinzas por ERC. “Se trata de una estrategia negociadora, se ve claramente”. Ante esto se impone el silencio como respuesta por el bando republicano.

La negociación, a mediodía del lunes, no había siquiera comenzado. “No sabemos lo que quieren, no hemos hablado”, apuntaba una fuente de ERC. Esta misma voz, sin embargo, sí tenía claro que la gestión de los fondos europeos Next Generation les corresponderá, tal y como anunciaron en campaña. No se concibe que en la legislatura de la reconstrucción, el ‘president’, vía su comisionado Miquel Puig, no sea el que controle esa lluvia de millones.

Suscríbete para seguir leyendo