PSOE, PP y Vox vuelven a impedir que el Congreso investigue a Juan Carlos

Una de las pocas noticias que se ha ganado un espacio en las portadas desde que llegó la pandemia ha sido la renuncia de<strong> Felipe VI</strong> a la herencia que le pueda corresponder cuando <strong>Juan Carlos </strong>muera. El jefe del Estado hizo pública esa decisión el 15 de marzo después de que la prensa del Reino Unido, Suiza y España se hiciera eco de supuestas cuentas opacas de su padre y de que se revelara que él mismo era beneficiario de una de ellas. Cuatro días después, por tercera vez este mes, varios grupos del Congreso pidieron una comisión de investigación sobre las finanzas del monarca emérito. El paso dado por Felipe VI les animó a volver a intentarlo, pero su iniciativa ha encontrado la misma respuesta: el veto del PSOE, el PPy Vox.

Estos tres partidos forman parte, junto a Podemos, de la Mesa del Congreso, el órgano que dirige los debates de la Cámara baja. En una reunión telemática celebrada ayer, socialistas, populares y ultras no admitieron la propuesta de comisión solicitada por ERC, PNV, JxCat, EH-Bildu, CUP, Compromís y BNG. La idea solo cosechó el insuficiente apoyo de Podemos. 

Artículos de la Constitución

PSOE, PP y Vox ya rechazaron abrir otras dos comisiones sobre Juan Carlos hace tres semanas, cuando empezaron a salir noticias sobre sus presuntos negocios con Arabia Saudí. El 10 de marzo frenaron dos peticiones diferentes para poder investigar al exjefe del Estado. Los tres grupos de la Mesa se acogieron al informe de los letrados de la Cámara, que blandieron, como lo han hecho esta semana también, la inviolabilidad del Monarca que recoge la Constitución para considerar que «no procede su admisión a trámite». Según los expertos, no se puede investigar a Juan Carlos por el artículo 56.3, que señala que la figura del Rey es «inviolable» y «no está sujeta a responsabilidad», y el 65,  que recoge que distribuye «libremente» el Presupuesto del Estado para el sostenimiento de su familia.

Ahora es aforado

La monarquía vive un momento delicado por el impacto que esas informaciones pueden tener en el actual reinado de Felipe VI, estos días volcado en reuniones telemáticas por el coronavirus. Juan Carlos dejó de ser inviolable al abdicar en junio del 2014, momento en el que lo único que conservó fue el fuero ante el Tribunal Supremo, como tienen los miembros del Gobierno o diputados y senadores.

La fiscalía anticorrupción española podrá investigar al monarca emérito si se hallan indicios de que blanqueó dinero después de dejar el trono, ya que se sigue la pista a las supuestas comisiones ilegales de Arabia Saudí (conocidas por unas grabaciones a su examiga Corinna zu Sayn-Wittgenstein) tanto en la justicia española como en la suiza, no centradas en el exjefe del Estado sino en personas españolas y extranjeras que podrían haber participado en esas operaciones ilegales.