pero dice que es "un honor" acompañarle

Espinar reconoce que no negoció personalmente con Errejón el acuerdo para Madrid

Ramón Espinar

Ramón Espinar / periodico

Europa Press

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El secretario general de Podemos en la Comunidad de Madrid, Ramón Espinar, ha reconocido que no se sentó a negociar personalmente el acuerdo para las primarias de la formación en la región de cara a las elecciones autonómicas de 2019 pero insiste en que es "un honor" acompañarle en el proyecto.

En declaraciones en Antena3, Espinar ha desgranado que ha tenido "algún intercambio de mensajes y una charla breve" pero han sido otros los que se han sentado a negociar. Ha destacado la voluntad política que ha habido para lograrlo, y lo ha tildado de "revulsivo" porque Íñigo Errejón sale "lanzado para ser presidente" de la Comunidad.

Asimismo, ha sostenido que ha discutido "fuerte" en ocasiones con él y que a veces han estado "en desacuerdo" pero cree que son más los puntos en los que coinciden. En este sentido, ha resaltado que éste "ha construido un muy buen perfil público, es muy buen candidato, con mucha capacidad de liderazgo y de pensar estratégicamente".

Y es que, el secretario general ha sostenido que en su formación no se pueden permitir "estar a la gresca" porque en ella "no sobra nadie" sino que falta gente para construir una sociedad mejor.

El 'affaire' Bescansa

Por otro lado, la dirección estatal de Podemos, que lidera Pablo Iglesias, todavía no ha tomado ninguna decisión sobre el futuro de la diputada en el Congreso y exdirigente del partido Carolina Bescansa tras el "grave" documento que difundió "por error" el pasado miércoles, con un plan para desbancar al secretario general.

De hecho, fuentes de la cúpula estatal consultadas por Europa Press han explicado que esperan que sea ella la que tome la iniciativa y "asuma responsabilidades" por generar el pasado miércoles uno de los momentos más tensos que ha vivido Podemos desde su fundación hace cuatro años.

No obstante, las fuentes consultadas no han concretado qué tipo de "responsabilidades" esperan que asuma, ni si estas deberían traducirse en una renuncia a su escaño en la Cámara Baja o incluso a su militancia en Podemos.

Bescansa perdió todas sus responsabilidades orgánicas en Podemos hace más de un año, cuando renunció a integrarse en ninguna de las listas que compitieron en la Asamblea de Vistalegre II de febrero de 2017 para renovar los órganos de dirección y estatutos del partido.

La cofundadora de Podemos tomó esta decisión tras impulsar, sin éxito, una especie de tercera vía alternativa a la dura disputa que entonces protagonizaban Iglesias y Errejón. Tras frustrarse sus intentos de ejercer de árbitro, decidió dar un paso atrás.

Actualmente sólo forma parte del llamado equipo 'Rumbo 2020', un grupo de trabajo sin capacidad ejecutiva formado por dirigentes y colaboradores del partido que tiene como objetivo trabajar, como una especie de 'Gobierno en la sombra', para ganar elecciones generales previstas para 2020. Asimismo, Bescansa se dedica a sus labores como diputada, si bien también ha perdido en los últimos meses algunas de las responsabilidades que tenía en el Congreso, como su puesto de vocal en la Comisión Constitucional, tras criticar la estrategia que estaba desarrollando la dirección de Podemos en Cataluña, demasiado próxima, a su juicio, a los independentistas.

De hecho, desde entonces la diputada se ha centrado en exponer su visión al respecto, y su propuesta de reforma constitucional para solucionar el conflicto catalán, en numerosas charlas con militantes de todo el país, en un intento de consolidar un perfil propio y crítico con la dirección.

Sí mantiene, por el momento, su puesto como portavoz de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea en la Comisión de Investigación presunta financiación ilegal del PP, aunque cada vez que acude un compareciente de especial importancia o repercusión mediática ha sido sustituía por otros diputados o dirigentes de más peso en el grupo parlamentario o la organización.