al contado

Bankia: ni delitos ni faltas

El fallo que absuelve a los 34 exdirectivos por la salida a bolsa del banco causa perplejidad

Olivas y Rato, en la salida a bolsa de Bankia.

Olivas y Rato, en la salida a bolsa de Bankia. / periodico

Agustí Sala

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Woody Allen estrenó en 1989 la película, 'Delitos y faltas'. Y me he acordado de ella por la sentencia de la Audiencia Nacional que esta semana ha absuelto a 34 exdirectivos de la entidad por la salida a bolsa en el 2011. Entre ellos está el exvicepresidente del Gobierno y exidirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Rato, que fue presidente del banco. A este, por cierto, le ha ido muy bien este fallo, ya que ha sido un elemento positivo para conseguir el tercer grado penitenciario por la pena que cumple por el caso de las tarjetas 'black'

En todo caso el recuerdo de la película del cineasta neoyorquino me viene a la cabeza no tanto por su argumento sino por el título. Y es que el fallo se produce después de que el Tribunal Supremo dictaminara, por la vía civil en el 2016, que se tenía que devolver el dinero invertido a los accionistas minoritarios, por haber facilitado una información en el folleto de emisión que era "incorrecta e inveraz".

No recurriré al 'Crimen perfecto' de Alfred Hitchcock en 1954 ni al incumplimiento de la segunda parte del clásico de Dostoievski, 'Crimen y Castigo',  (Crimen sin castigo podríamos decir) pero sí diré que el resultado de este caso produce, cuando menos, perplejidad. Por la vía penal no se aprecia delito y, por tanto, se considera que los administradores no merecen ningún reproche, mientras que por la vía civil provocó la devolución de más de 1.800 millones a los afectados minoristas y nos acabó costando a los contribuyentes 24.000 millones de los que solo hemos recobrado unos 3.000.

Algo falla. Es verdad que en la vía penal no basta con los disparos al aire: hay que imputar los delitos bien definidos a personas concretas, algo de lo que, a jucio de la Audiencia Nacional, carecía la denuncia. Pero si el banco proporcionó información "incorrecta e inveraz" ¿no es esto un motivo suficiente para poder actuar de alguna manera? ¿Nadie es responsable de eso? Algo falla en el entramado jurídico o en la acusación.

La sentencia de la Audiencia Nacional destaca, además, un punto que me parece muy importante: todos los supervisores, desde el FROB al Banco de España, la CNMV e incluso la Autoridad Bancaria Europea (EBA), dieron su visto bueno a la operación. ¿Ceguera? ¿Escaso control? La sensación es de cierta impunidad. Como afirma el catedrático <strong>Guillem López Casanovas</strong>, fue una operación de Estado. Eso lo justifica todo. Ni culpables ni responsables. Ni delito ni falta y la pena, para los contribuyentes. 

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