Muere a los 76 años

Jane Birkin, adiós a un verdadero icono pop

Birkin y Gainsbourg, madre e hija y compañeras de cartel

Crítica de 'Oh, pardon, tu domais...' de Jane Birkin

Jane Birkin, más allá del amor y la muerte

Jane Birkin, en un concierto en Girona en 2019

Jane Birkin, en un concierto en Girona en 2019 / Ferran Sendra

Quim Casas

Quim Casas

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En los recién publicados en castellano ‘Diarios 1957-1982. Munkey diaries’, cuyo editor, Felipe Cabrerizo, consiguió sacar adelante tras conseguir, hace relativamente poco tiempo, el visto bueno de la propia Jane Birkin, la cantante y actriz anglo-francesa escribe que solo se reconoce la felicidad cuando ha pasado un tiempo. Hay muchos tiempos en la obra de esta extraordinaria artista, fallecida este domingo a los 76 años. Muchos fueron duros: la mala relación con su primera pareja, el compositor John Barry; los malos momentos vividos con la segunda, Serge Gainsbourg; el suicidio de su primera hija, Kate Barry. Muchos fueron felices: otros aspectos en la relación con Gainsbourg; ver crecer artísticamente a su hija Charlotte; la gestación de obras maestras de la música pop francesa como ‘Histoire de Melody Nelson’ (1971), de Gainsbourg, en la que Birkin posa en portada y pone voz al personaje central, o su trayectoria cinematográfica, cada vez más asentada y con relevantes interpretaciones.

Fue el cine, antes que la ‘chanson’, lo que la catapultó a una primera y aún efímera fama cuando encarnó a una de las dos jóvenes aspirantes a modelo que retozan con el cotizado fotógrafo en ‘Blow up’ (1966), el filme de Michelangelo Antonioni rodado en el ‘swinging London’. Dos años después ya formaba pareja sentimental y artística con Gainsbourg. Su matrimonio con Barry, famoso entonces por sus músicas para las películas de James Bond, había sido un desastre. En las páginas de su diario, Birkin deja constancia del distanciamiento inmediato entre ellos y llega a decir que lo único que quería era tener un hijo, pero que resultaba difícil teniendo en cuenta que solo hacían el amor tres veces al mes. Coincidieron artísticamente en una sola ocasión, ‘El knack… y cómo conseguirlo’ (1965), comedia del ‘free cinema’ que supuso el debut de Birkin, con música de Barry.

Una maravilla de arquitectura pop

Gainsbourg ya había grabado con Brigitte Bardot la incendiaria ‘Je t’aime moi non plus’, pero B.B. le pidió que no publicara el disco para no complicar más la relación con su esposo, el magnate Gunter Sachs. Serge volvió a grabarla meses después a dúo con su nueva pareja. Lanzada en 1968 en formato sencillo, ‘Je t’aime moi non plus’, melódicamente inspirada en la famosa ‘A white shade of pale’ de Procol Harum, es una maravilla de arquitectura pop que se benefició durante décadas de su abierta carga erótica. Sin pretenderlo quizá, la hermosa Birkin, con su cuerpo de adolescente, se convirtió en uno de los grandes mitos sexuales de su época.

Su carrera fue virando, madurando, transformándose, como se fue transformando su relación con Gainsbourg, personaje tóxico, cierto –como llegan a reconocer madre e hija en el documental ‘Jane por Charlotte’ (2021), dirigido por la propia Charlotte Gainsbourg–, pero la persona a la que más amó Birkin, con todas sus consecuencias. Trabajaron juntos en películas como ‘Los caminos de Katmandú' (1969) y ‘Romance de un ladrón de caballos’ (1971). En 1969 apareció el disco ‘Jane Birkin-Serge Gainsbourg’, con temas alternados de ambos. El primer álbum en solitario de Birkin fue ‘Di doo dah’ (1973), aunque todas las canciones las firmó su pareja.

Su discografía es impecable: ‘Ex fan des sixties’ (1978), ‘Baby alone in Babylone’ (1983), ‘Arabesque’ (2002) o ‘Fictions’ (2006); en este último estuvo arropada por The Divine Comedy, Portishead, Johnny Marr y Rufus Wainwright. Sus conciertos basculaban entre el arrebato orquestal de la mejor ‘chanson’ y momentos poéticos, de tenue delicadeza.

Aunque apareció en comedias del montón, su filmografía está plagada de espléndidas interpretaciones en no menos excelentes películas. Citemos tan solo ‘La pirata’ (1984), uno de los filmes que hizo con su tercera pareja, Jacques Doillon; ‘La bella mentirosa’ (1990), una de sus tres películas con Jacques Rivette; ‘Daddy nostalgie’ (1990), junto a Dirk Bogarde y a las órdenes de Bertrand Tavernier, y ‘Te amo, pero yo no’ (1976), realizada por Gainsbourg a partir de su canción, con Birkin luciendo una imagen asexuada junto a un mito del ‘underground’ warholiano como Joe Dallesandro.