Crítica de 'Mamá o papá': Miren Ibarguren o Paco León

En 2015 el francés Martin Bourboulon abordó en 'Papá o mamá' la separación matrimonial desde un punto de vista tan inédito como destroyer, dándole la vuelta a los cruentos procesos de custodia y configurando una comedia negra tan incómoda como libre y bastante salvaje ¿Qué pasaría si el padre y la madre en vez de hacer méritos para quedarse con sus hijos se esforzaran haciéndoles putadas para quitárselos de encima? 

Dani de la Orden, nuestro experto nacional en remakes, adapta este material inflamable a la realidad de nuestro país, siempre un poco más blanca a niveles de convencionalismo industrial que la francesa. Su 'Mamá o papá' puede que sea menos bruta, pero sigue manteniendo buenas dosis de incorrección política que se agradecen a la hora de reír sin miedo a la autocensura, introduciéndonos en una vorágine de situaciones descabelladas en las que los niños se convertirán en los más damnificados, glups. No hay que escandalizarse ni llamar a las asociaciones de protección del menor, al fin y al cabo, es una comedia familiar, aunque se agradece que escape por una vez de los parámetros retrógrados que suelen dominarla. 

La película podría también llamarse 'Miren Ibarguren o Paco León', ya que son los dos intérpretes los que vertebran con su talento cómico todo este dispositivo tan malvado como disfrutón. Imposible elegir a uno de ellos, hay que quedarse con los dos. 

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