Marina Mascarell lanza un canto a la diversidad con 'Orthopedica corporatio'

Estar dos meses ensayando y preparando una nueva producción en la Sala Maria Aurèlia Capmany del Mercat de les Flors es un lujo. Marina Mascarell, premiada coreógrafa hispano-neerlandesa, valora "el regalo" que supone haber podido trabajar por primera vez en estas condiciones cerca de su familia valenciana para crear 'Orthopedica corporatio'. Este jueves se estrena esta curiosa pieza interpretada por bailarines de diferentes edades, gente de entre 23 a 55 años, con el púbico dispuesto a cuatro bandas. "Buscaba el equilibrio entre cuerpos diferentes que representaran esa comunidad del futuro", explica la coreógrafa, que ha creado obras para destacadas compañías como Nederlands Dans Theater de La Haya, Göteborgs Operans Danskompani, Lyon Opera Ballet, Skånes Dansteater de Malmö y Dance Forum Taipei, entre otras.

Los intérpretes Alessandro Sabatini, Reiko Ohta, Amancio Gonzalez, Louis Gillard, Eli Cohen y Cree Barnett Williams proceden de mundos diversos. Todos han transformado sus cuerpos con objetos que les obligan a moverse de otra manera. "Son cosas que se han encontrado en la naturaleza: no los sacaron de la basura, son objetos abandonados. Hay mucho plástico y otros materiales inorgánicos, pero también material orgánico", explica Mascarell. "Con ellos se convierten casi en cíborgs porque los materiales son como extensiones de su cuerpo. Son seres de otra naturaleza que aprenden de los objetos, muletas que transforman su relación entre ellos y su comportamiento". También los utilizan para crear sonidos que se integran en la banda sonora. La pieza podría ser casi la cara opuesta de 'Mongrel', también vista en el Mercat.

"Dibujo el futuro que me gustaría imaginar: una sociedad que no separa por género, por lugar de procecencia, por edad"

— Marina Mascarell

'Orthopedica corporation' se inspira en novelas de ciencia ficción y en conceptos como la hiperempatía, la capacidad extrema de sentir lo que experimentan otros. "En ella dibujo el futuro que me gustaría imaginar: una sociedad que no separa por género, por lugar de procedencia, por edad. En definitiva, una comunidad más abierta a las singularidades de cada persona, donde se acepten mejor los límites de cada cual". A diferencia de otras creaciones, en esta Mascarell ha jugado más con el bagaje de cada intérprete.

Junto a 'Orthopedica corporatio', que se podrá ver de jueves a domingo, Mascarell presentará el fin de semana 'Bird dog' en la sala Pina Bausch. Es un proyecto 'site-specific' que llegará filmado en directo desde cuatro ciudades diferentes -Tokio, Lisboa, Washington y La Haya-, protagonizado por cuatro destacados bailarines contemporáneos -Spencer Dickhaus, Muñeca Botkay, Shamel Pitts y Yasutake Shimaji- que se dedican a subvertir la interacción con el espacio público. "Cuestionan nuestra relación con el espacio y dan fuerza al sentido del tacto, algo olvidado en la ciudad", señala Mascarell. Esta nueva creación es fruto de la pandemia, de los nuevos caminos que hubo que inventar para mantener la danza a flote. "Nuestra profesión se ha resentido porque necesitamos compartir las cosas y sentir las energías de los otros. Todos nos hemos cuestionado hacia donde vamos, qué espacio tenemos y cómo vamos a transformarlo. Somos una sociedad en transición".