CRÍTICA DE CINE

'Vengadores: Endgame', la lírica de los superhéroes

'Vengadores: endgame' es el 'crescendo' final de una magnífica obra coral que es la saga de este universo cinematográfico de Marvel

Trailer oficial de 'Los vengadores 4'

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Quim Casas

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El universo cinematográfico de Marvel se ha diseñado meticulosamente en los últimos años para alcanzar un opus glorioso. 'Vengadores: endgame' es ese 'crescendo' final del género lírico, como si todos los que han ideado esta magnífica obra coral que es la saga de 'Los Vengadores' –incluyendo las películas de Iron Man, Capitán América, Thor, Black Panther, Spider-man, Guardianes de las Galaxias, Ant-man, Hulk, Dr. Strange y Capitana Marvel– pensaran en una ópera canónica con sus momentos dulces, sus situaciones violentas y trágicas, los finales dichosos o tristes.

La primera parte de este final, 'Vengadores: infinity war', dejó a los seguidores en estado de 'shock'. La disolución literal de tantos personajes en los planos finales dejaba un poso de amargura a la vez que generaba expectativas inciertas. ¿Y después de esto, qué?, nos preguntábamos hace un año. ¿Y ahora qué?, seguimos planteándonos cuando las tres horas de 'Vengadores: endgame' llegan a su fin como una exhalación. 

La tentación del 'spoiler' es innegable, ya que no puede entenderse una lectura crítica del filme sin recurrir a algunos de los elementos que han decidido utilizar, los guionistas y los directores, para dotar de envergadura y coherencia a este tramo final de la gran saga en la que se han convertido los filmes de 'Los Vengadores', en colectivo y por separado.

Sí que podemos decir que nada ha sido dejado al azar en las apariciones y desapariciones de los personajes cruciales. O en la definición del villano de la función, el apocalíptico Thanos, quien decidiera eliminar el 50% de la especie humana y que, en todo momento, se presenta y evalúa lejos del cliché del simple antagonista. O en el intento de seguir humanizando, vía cotidianidad (los elementos familiares que atañen a Iron Man y Ojo de Halcón, la vulgaridad cervecera en la que ha caído Thor) o sentido del humor (el filme abunda en comentarios irónicos incluso en las situaciones épicas) a aquellos para quien tener poderes sigue representando una gran responsabilidad.