Clive Owen: "Mis hijas piensan que soy un chiste"

Dice mucho sin hablar demasiado. Clive Owen es una estrella de Hollywood marca british: tipo duro con pose de salvar el mundo a diario. Ahora se pasa al terror a la española. El viernes estrena Intruders, suspense con la firma de Juan Carlos Fresnadillo. "No quiero hacer algo simplemente porque sea ventajoso para mi carrera --confiesa el actor en la revista Dominical--. No tengo un plan. Mis decisiones son puramente instintivas". El británico aún tiene presentes sus orígenes de clase obrera. "De no haber tenido suerte, ahí seguiría", asegura. Así que no se siente especial. "Yo no soy mejor que nadie". Ni siquiera impresiona a sus dos hijas. "En absoluto. Es más, piensan que soy un chiste".

La revista de EL PERIÓDICO también habla con Stella Maris Maruso en la Fundación Salud, donde ha ayudado a 30.000 enfermos a llegar con plenitud a la muerte. Además, viaja a Salónica, la segunda ciudad de Grecia. La ciudad de los espíritus, la llaman. Y se cuela en una granja sueca con el panadero Ibán Yarza, voluntario de la organización internacional WWOOF.

Dominical incluye esta semana una segunda revista: Extra Moda Mujer. La pose otoñal de la portada es de la actriz Natasha Yarovenko, que empuña espada en la película El Capitán Trueno y el Santo Grial. También entrevista a Giorgio Armani --"he preparado mi empresa para el futuro", adelanta-- y a la modista catalana María Escoté.