El BBVA reclama al Gobierno que recupere protagonismo en Europa y Latinoamérica

El presidente del BBVA, Francisco González, ha asegurado este viernes que España "ahora tiene la oportunidad de asumir el liderazgo y el avance en la creación" del "gran proyecto europeo" en un "momento crítico" para el contienente, y al tiempo ha defendido que "también tiene que recuperar su protagonismo en Latinoamérica", toda una puya al Gobierno. El país, ha argumentado, "tiene un gran prestigio en el mundo, y particularmente en Europa" y cuenta con "mayor estabilidad política" que otros países, lo que le permitirá tener "más voz y más peso en las decisiones clave que Europa ha de tomar en este año".

Con todo, ha destacado que, aunque "España está pasando por un buen momento", el paro todavía es muy alto. "No hay que bajar la guardia y hay que seguir el proceso de refromas", ha advertido al Ejecutivo y a los partidos de la oposición durante la junta de accionistas del banco, celebrada en Bilbao

El ejecutivo ha estimado que la eurozona crecerá el 1,6% este año, mientras que España mantendrá su "liderazgo" con un 2,7%. El continente, ha continuado, atraviesa un "período incierto, sobre todo por el 'brexit' y por los riesgos asociados al populismo", en un año con elecciones "clave" en Francia, Italia, Alemania y Grecia, además de las recientes en Holanda. Pero esos riesgos están dando lugar a "importantes iniciativas para afrontar los problemas estructurales del proyecto europeo", a las que se podría dar un impulso mayor tras los comicios germanos de septiembre.

González también ha advertido de que el "riesgo geopolítico está creciendo porque en muchos países se están buscando soluciones fáciles y unilaterales a problemas complejos y globales". Soluciones, ha mantenido, que "pasan por limitar el libre comercio y el movimiento de personas y coartar la iniciativa privada para proteger producciones o empleos locales o nacionales", un mensaje en clara referencia a Donald Trump.

DURO CAMBIO

El banquero ha admitido que los trabajadores pueden sentir que sus empleos "son más inseguros y vulnerables ante la globalización y el cambio tecnológico", pero ha sostenido que el proteccionismo "no es el camino para crear riqueza". Hacen falta políticas, ha defendido, "coordinadas de ámbito global" que favorezcan la integración económica y reformas que den "más flexibilidad" a las economías y "más oportunidades a las personas, mejorando la educación y fomentando el desarrollo científico-tecnológico y la innovación". "El avance tecnológico llevará a medio plazo a mayor crecimiento y riqueza. Pero estamos en un periodo de transición que va a ser dura para muchísimas personas, sectores o países. De ahí la importancia del sector público para minimizar estos riesgos", ha advertido.

González, que ya en el 2000 aseguró que el BBVA había emprendido un "ambicioso proyecto de transformación" aprovechando las nuevas tecnologías, ha asegurado que el banco ha terminado "más o menos la larga etapa de preparación" y que, aunque ya da "resultados tangibles", será entre el 2018 y el 2020 cuando se produzca una "explosión de las realizaciones y los resultados".

Los sindicatos han acusado al banco de crear un "clima del miedo" laboral, con despidos a "cabezas de turco" y presiones para que trabajadores acepten su baja voluntaria. El presidente lo ha negado, pero ha admitido que el banco debe reducir plantilla para adaptarse al cambio tecnológico y defender el interés de sus accionistas.