entrevista con el Productor i director del festival Músiques des d¿un Balcó

Josep Casellas: "Un día decidí dar conciertos por la ventana"

Actuaciones en directo y desde casa Autóctono de Sant Andreu, a este amante de los acordes se le ocurrió organizar conciertos en los balcones de la plaza del Comerç, donde ha vivido siempre. Y lo hizo.

Josep Casellas

Josep Casellas

ALBA PEÑA / Barcelona

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Apoyada en un rincón del estudio hay una guitarra española y, en el comedor, un piano tiene las partituras aún colocadas, como si alguien lo acabara de tocar. En esta casa la música se cuela por el resquicio de la puerta y sale por los balcones, que han sido escenario de muchas actuaciones. Su dueño, Josep Casellas, productor de acontecimientos musicales y culturales, lleva meses preparando con ilusión la tercera edición del festival Músiques des d'un balcó, que se celebrará el próximo 4 de diciembre.

—En balconitis.org se lee: «Cuando nos mudamos elegí la habitación del balcón que da a la plaza. Solo hay que abrir la ventana y salir a tocar la guitarra». ¿Así empezó todo?

—Sí, exactamente así. Cuando llegué al piso, instalé mi despacho en la habitación que tiene balcón. Un año después, tocando la guitarra, se me ocurrió que podría abrir la ventana y montar un concierto. A partir de ahí, empecé a contactar con músicos y a montarlo todo. Fue una casualidad. De hecho, si no era aquí, no lo hubiera hecho en ningún otro sitio.

—¿Por qué?

—Aquí conoces a los vecinos. Bajas a la calle, hablas con uno y con otro, y empiezas a difundir tu idea. Además, hay que ser prudente porque la casa de cada uno es eso, de cada uno. Empecé con mi vecino de abajo, luego la dueña de la tienda de ropa de niños de debajo de mi casa… Y así, medio en broma medio en serio, montamos el primer festival.

—La pasada edición participaron seis balcones y cinco grupos. Este año ya son seis formaciones. ¿El objetivo es llenar todos los balcones?

—No, los balcones son más o menos los mismos cada año. No se trata tanto de cantidad, sino de conseguir los mejores. Hay un perímetro de la plaza donde hay árboles, y esos, por ejemplo, no interesan porque no tienen buena visibilidad. Y también prefiero que sean los pisos más bajos, porque se oye y se ve mejor.

—¿Alguien ha copiado ya la idea?

—Sí, hay sitios en que se está imitando la fórmula, e incluso hay un par de capitales de comarca y algunos distritos de Barcelona que se han puesto en contacto conmigo porque quieren hacerlo. Pero yo creo que en esos casos se quedará con la estética de unos grupos de música tocando en balcones; la forma de hacerlo, el cómo, se perderá.

—Este año se celebra la tercera edición. ¿Esperaba este respaldo vecinal?

—Creo que todo se tiene que probar. Esto no se había hecho nunca, se ha probado, y resulta que funciona. Me acuerdo que el primer año el concierto empezó con apenas 15 personas en la plaza pero, poco a poco, se llenó de gente. Después de eso, supe que al año siguiente funcionaría.

—Visto el éxito, ¿tiene pensado repetir todos los años?

—A mí me gustaría que esto se convirtiera en una tradición del barrio, eso me encantaría. Pero depende de muchos factores, ya veremos.

—Un festival de música por la tarde. ¿Por qué en horario comercial?

—Tendemos a organizar este tipo de acontecimientos por la noche. Pero este festival tiene un punto deperformance.La gracia es que la gente, mientras pasea, se lo encuentra. Esta calle es comercial, y ese día habrá muchas tiendas abiertas. No se trata de que la gente tenga que venir expresamente el domingo, por ejemplo, lo bonito es que, de pronto, se tope con la música.

—Habrá estilos muy variados, desde gospel y bossanova hasta neorockabilly o música clásica. ¿Cómo se hace la selección?

—Se trata de que venga un abuelo con su nieto y ambos encuentren conciertos a su gusto, y para eso necesitas muchos estilos. No me dirijo a un público concreto. Además, en Sant Andreu no hay una oferta musical y se trataba de traer músicas abiertas. Si te encierras en un estilo pierdes el interés de una parte del público. Aquí, la gracia es que, en apenas dos horas, escuchas a muchos grupos y muy diferentes.

—He leído que, por primera vez, se hará una actuación dereactable mobilea cuatro manos. Y eso es...

—¡Ah, sí! La verdad es que tenía muchas ganas de hacerlo. La reactable es una aplicación para iPhone y para iPad con la que uno mismo puede crear música. Por primera vez, se hará con los dos dispositivos al mismo tiempo. Es decir, dos personas, de ahí lo de las cuatro manos.