Francia se rinde a Gasol

Con una actuación antológica, 40 puntos y 11 rebotes, una de las mejores de su carrera, de esas que se recordará con el paso del tiempo, Pau Gasol catapultó a la selección española a la final del Eurobasket y le garantizó su clasificación para los Juegos de Río. Francia tuvo que rendirse al talento de uno de los mejores jugadores de la historia, y acabó cediendo en la prórroga (80-75) después de haberse salvado del KO en los últimos segundos del tiempo reglamentario gracias un triple providencial de Batum.

Gasol fue el alma de una selección que contó con el talento de Sergio Rodríguez, y elevó sus prestaciones en defensa para dejar una de esas gestas que han ido forjando su leyenda. La victoria llegó ante Francia, el anfitrión, el defensor del título, ahogando los gritos de los de 27.000 aficionados que empujaron a su selección. El triunfo tiene el dulce sabor de la venganza. Hace un año. Francia apartó a España de sus sueños en el Mundial. Ayer el equipo de Scariolo le devolvió la moneda.

COMERSE EL MUNDO

La selección francesa saltó a la cancha con ganas de comerse el mundo Fue una puesta en escena realmente intimidatoria con la que encaró el partido gracias a su dominio del rebote y a los triples de De Colo y Fournier (6-13, m. 6).

Le costo mucho más a España sentirse cómodo. Salvo a Gasol, muy metido en el juego desde el primer minuto, al resto de jugadores no les fue fácil coger el hilo al partido, y sobre todo soltarse y mirar al aro.

Scariolo buscó más contundencia defensiva con la presencia de Reyes en lugar de Mirotic. También más fluidez ofensiva con la entrada de Sergio Rodríguez y los cambios consiguieron cambiar el perfil de la selección, que se mostró mucho más agresiva en todas sus acciones a partir de ese instante.

Fue también a través de la desconexión primero de Tony Parker, con el gran entramado defensivo construido por Scariolo, y después a través de los triples de Sergio Rodríguez y Llull, cuando España cogió el paso a su rival, aunque Francia aún se fue dominando al descanso (32-33).

10-0 EN CONTRA

Esa fluidez se perdió en la reanudación sobre todo por la falta de producción de la línea exterior, y también de un Mirotic demasiado ofuscado con los árbitros. Con Francia elevando la presión sobre el balón, para la selección se convirtió en una gesta conseguir cada canasta.. Solo a través de los tiros de libres lo consiguió, la mayoría de Gasol.

Durante más de cinco minutos (39-41), se mantuvo el equilibrio pero Francia consiguió tomar la iniciativa gracias a dos aspectos fundamentales. Su avasallador dominio del rebote en esos instantes, aunque esa faceta acabó por igualarse. Y también gracias a su inspiracíon desde la linea de triples. Los tres conseguidos en ese cuarto por Parker, Lauvergne y Gelabale construyeron un parcial de 10-0 que dejó a la selección descolacada (39-51).

ENORME FRIALDAD

Con una inmensa montaña que escalar, la seleccíón ofreció su mejor imagen, sobre todo a nivel defensivo, para conceder solo 10 puntos en el cuarto decisivo. No bajó los brazos y siguió trabajando, a pesar de entrar en los últimos cinco minutos siete puntos por debajo (54-61).

Demostró carácter el equipo para darle la vuelta el marcador de la mano de Gasol y mostró una frialdad enorme en los tiros libres,ayer fundamentales (24 de 26). Ni siquiera el triple providencial de Batum en los últimos segundos que permitió la prórroga, hizo perder la cabeza a España, que llevó el partido a donde quería: a una situación de presión que Francia no fue capaz de afrontar.

Parker y Batum fallaron cinco tiros libres en esos instantes finales, cavando su propia tumba. Ellos y Pau Gasol, autor de los últimos seis puntos, dos rebote y un mate que puso la mejor rúbrica a la victoria.