¿Nilo o Amazonas? Expedición para aclarar cuál es el río más largo del mundo

Su nombre aparece en todas partes: desde el popular libro de los Récord Guinness hasta el libro de texto más humilde. El Nilo, que con sus 6.695 kilómetros de longitud recorre África desde el Mediterráneo hasta Burundi, se considera generalmente el río más largo del planeta. Sin embargo, en los últimos años su liderazgo sido puesto en entredicho. Al río de los faraones le ha salido un competidor, al que sólo le separan unos kilómetros de diferencia, pero que, con los últimos hallazgos, podría superar en realidad de manera holgada: el Amazonas.

Entre grandes dificultades para establecer el nacimiento del Amazonas, su longitud se ha venido fijando en 6.400 kilómetros. Sin embargo, en 2007 una expedición financiada entre los gobiernos de Perú y Brasil reveló que el río medía en realidad 200 kilómetros más que el Nilo, hasta llegar a los 6.800 kilómetros. Fue uno de los afluentes más lejanos, el Mantaro en Perú, el que sumaría al coloso sudamericano esas decenas más de longitud que avalarían su primera posición en el ranking mundial.

Pese a que eso fue ya suficiente para convencer a toda Latinoamérica de que el Amazonas era el río más largo del mundo, no ha ocurrido lo mismo a nivel mundial, donde las escuelas siguen explicando a los más pequeños que el Nilo es el río más largo del mundo.

Para zanjar este debate, el explorador brasileño Yuri Sanada se embarcará en una expedición de casi seis meses para recorrer los casi 7.000 kilómetros del río Amazonas, desde los Andes peruanos hasta la desembocadura del Atlántico, pasando por Colombia y Brasil. “Aunque ya está probado que el Mantaro está conectado con el Amazonas, hasta ahora nadie ha realizado una medición completa de este río sobre el terreno desde Los Andes hasta el océano”, explica Sanada.

El investigador, además, justifica el proyecto aludiendo a otras famosas expediciones. “La cima del monte Everest la han alcanzado alrededor de 4.500 personas y 1.500 han cruzado a remo el Atlántico, pero sólo unas diez personas han hecho el trayecto desde el nacimiento del río hasta su desembocadura”, relata. Además, esta decena escasa de personas que se aventuraron a recorrer con kayak el gran río no lo hicieron con fines científicos.

Proyecto científico y divulgativo

El proyecto, titulado ‘Amazonas, del hielo al mar’, comenzará a navegar en abril de 2024 gracias al liderazgo de la productora cinematográfica Amazon Adventure. El proyecto dará como resultado varias producciones, como una serie web, una serie de televisión que estará disponible en streaming, un documental, un proyecto educativo VR/AR y una película educativa IMAX para museos en 40 países”, tal y como indica la productora en su página en internet.

“Toda esta experiencia será debidamente documentada para poder confirmar si el Amazonas es el río más caudaloso del mundo, tanto en extensión territorial como en volumen de agua”, revela Amazon Adventures. Pero no es el único objetivo, la expedición también quiere defender el uso de las energías limpias y hacer las veces de campaña de concienciación para reducir la contaminación del agua.

Así, en lo que se refiere a energías limpias, se probarán canoas eléctricas totalmente desarrolladas en Brasil movidas con energía solar y a pedales. Estas embarcaciones, además de ser más baratas que los fabricados en Alemania, también son más resistentes y fáciles de reparar que las chinas.

Para concienciar sobre la contaminación, “vamos a documentar con cámaras profesionales la biodiversidad de la zona y los daños que viene sufriendo por causa del hombre, por culpa de los mineros ilegales, de los narcotraficantes y del crimen organizado que allí se han instalado”, adelanta Sanada.

La expedición coordinada por Sanada recorrerá en paralelo dos vertientes del río. Un grupo descenderá por las aguas rápidas del Mantaro haciendo rafting, mientras que otro recorrerá la orilla del Apurímac a caballo con la exploradora francesa Céline Cousteau, nieta del legendario oceanógrafo Jacques Cousteau. Sanada y otros dos exploradores comenzarán su trayecto en el lugar donde estos dos cursos de agua se encuentran. El periplo será acompañado en algunos tramos por un barco de apoyo, que servirá de base para las tareas audiovisuales y científicas.

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