Municipios afectados

La entrada en emergencia por sequía indigna a los ayuntamientos: "Es imposible controlar quién riega su jardín"

Alcaldes de los municipios afectados critican que el peso de hacer cumplir las restricciones recaiga solo en ellos

Restricciones del estado de emergencia por sequía: 200 litros por persona y prohibido regar jardines y llenar piscinas

Mapa de los primeros municipios de Catalunya que entran en emergencia por sequía | Lista

Catalunya activa por primera vez la alerta máxima por sequía y pone en emergencia a 22 municipios del Empordà

Peralada

Peralada / The Peralada castle is located in Peralada Catalonia Spain. It was originally build in IX.

Guillem Costa

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Cada vez que se anuncian restricciones por sequía, la desesperación de los alcaldes de los municipios pequeños aumenta. "¿Alguien me puede decir cómo vigilamos los jardines de todo el pueblo? Con los escasos recursos de los que disponemos, es prácticamente imposible". Así reacciona el alcalde de Peralada, Miquel Brugat, ante la decisión del Govern de declarar la emergencia en su localididad y en otros 23 municipios. Su enojo e incredulidad tienen una explicación: hacer cumplir las restricciones es única y exclusiva responsabilidad de los ayuntamientos.

"No tiene sentido invadir espacios privados para comprobar si a las dos de la madrugada alguien está regando el césped", critica. A día de hoy, ya está estudiando cómo activar una ordenanza que les permita multar a los vecinos que gasten más agua de la permitida. Sin embargo, admite que será muy difícil de aplicar.

No tiene sentido invadir espacios privados para comprobar si a las dos de la madrugada alguien está regando el césped

— Miquel Brugat, alcalde de Peralada

"Si ni la Agència Catalana de l'Aigua no se atreve a regularlo, lo que no pueden hacer es echarnos el muerto a nosotros", espeta. Sus palabras son contundentes, pero el suyo no es una crítica solitaria. Lo secundan otros alcaldes, como los de Mollet de Peralada, Sant Climent Sescebes o Espolla.

Según los datos oficiales, Peralada tiene 1.800 habitantes. Pero Brugat asegura que en el pueblo vive más gente: "No están empadronados pero viven aquí. Y esto provoca que superemos de largo el límite legal en el consumo de agua". El alcalde también se muestra preocupado por el sector agrícola y asegura que no regarán zonas verdes.

"Vas por algún municipio, ves sus zonas ajardinadas y está todo verde, cosa que no ocurre en el área de Barcelona"

— Samuel Reyes, director ACA

¿Los entornos del emblemático Castell de Peralada, con su respectivo festival, estarán secos en unas semanas? "Así debería ser, sí", afirma. Sobre el riego de plantas ornamentales, el director de la ACA, Samuel Reyes, se ha mostrado sorprendido por el paisaje en algunos pueblos: "A veces, vas por algún municipio, ves sus piscinas, sus zonas ajardinadas... Y está todo verde, cosa que no ocurre en el área de Barcelona, donde las zonas verdes están muy secas".

En Mollet de Peralada vive todavía menos gente (unos 200 habitantes). "Intentaremos mejorar, pero la verdad es que no tenemos la herramientas necesarias para vigilar a los vecinos", reconoce el alcalde, Alfons Vilanova. El ayuntamiento se ha presentado a la convocatoria de ayudas de la ACA para hacer reparaciones en su red de distribución en alta. Precisamente por este motivo, no quiere oír hablar de multas: "Me parecería surrealista que nos multaran por gastar más agua de la cuenta. Ahora no podemos detectar quién incumple, pero una multa solo complicaría la situación de un consistorio pequeño".

"Me parecería surrealista que nos multaran por gastar más agua de la cuenta"

— Alfons Vilanova, alcalde Mollet de Peralada

En Espolla (unos 400 habitantes), otro pueblo que entrará en emergencia, de momento, cumplen con el tope establecido. "Nos hemos esforzado mucho en reparar la red de tuberías y nos apuntamos a todas las convocatorias de la ACA", detalla, orgulloso, el alcalde, Carles Lagresa. Sin embargo, coincide con sus colegas: "La presión no puede reacaer sobre los ayuntamientos".

Todos ellos se sienten señalados. De los 24, 11 son conscientes de que consumen más agua de la permitida, pero reclaman recursos que les permitan revertir la situación, además de exigir también un esfuerzo a sus conciudadanos. Las normas están claras: prescindir del riego del jardín, no llenar piscinas vacías y hacer un consumo responsable cada vez que el agua salga del grifo.

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