Combates encarnizados en Sudán entre el Ejército y los paramilitares

Los combates violentos continúan por tercer día consecutivo entre el Ejército de Sudán y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) cerca de Wad Madani, considerada una ciudad refugio desde el estallido de la guerra en abril, y obligaron a desplazarse a más de 14.000 personas, según diversas fuentes.

El Comité de Resistencia de Wad Madani, una red vecinal creada en 2013 y que adquirió relevancia durante las protestas de 2019 que derrocaron al exdictador Omar al Bashir, indicó este domingo en un comunicado que los enfrentamientos se reanudaron por tercer día al este de esta ciudad refugio.

Además, indicó que las FAR evacuaron a los habitantes del barrio Riad al Qadisiyah, mientras llevaron a cabo un "notable despliegue de francotiradores en las azoteas de los edificios" de gran altura.

La red de voluntarios aconsejó a los ciudadanos "evitar deambular, quedarse en casa y mantenerse alejados de ventanas y puertas", además de advertirles sobre "explosivos que caen al azar sobre las viviendas".

Según dijeron a EFE testigos presenciales, la Fuerza Aérea del Ejército sudanés lanzó intensivos bombardeos contra las posiciones de los insurgentes de las FAR al este de la ciudad de Wad Madani, situada en el centro del país, mientras que los rebeldes respondieron a los aviones con cañones antiaéreos.

En esta misma jornada, el Sindicato de Médicos de Sudán alertó de una "catástrofe" sanitaria por la violencia desatada en la ciudad desde el pasado viernes.

"La expansión de la guerra de la ciudad de Wad Madani nos pone ante una de las mayores catástrofes humanitarias en medio de esta guerra", advirtió en las últimas horas el sindicato en un comunicado.

Según datos de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), alrededor de 14.000 a 15.000 personas se desplazaron desde la localidad de Madani Al Kubra hacia zonas vecinas al oeste de Wad Madani y otros sitios en el estado de Al Yazira, así como otros estados sudaneses como Sennar o Al Qadarif.

El Ejército sudanés interceptó el pasado viernes un ataque de las FAR en Wad Madani, considerada como una "zona segura" y refugio de unos 1,5 millones de desplazados que huyeron de la guerra que se desencadenó el 15 de abril de este año.

Tensiones en el Ejército

El conflicto armado en Sudán estalló por las tensiones sobre la reforma del Ejército y la integración de los paramilitares en las fuerzas regulares, en medio un proceso político para encauzar de nuevo al país en la senda democrática tras el golpe de Estado de 2021.

La guerra ha dejado ya alrededor de 12.000 muertos, más de 6 millones de refugiados y desplazados, además de una catástrofe humanitaria en el país.