Guerra fría tecnológica

Estados Unidos restringe la venta de chips sofisticados a China y Rusia

La decisión de Washington, que limita la exportación de semiconductores clave para la industria militar, supone una vuelta de tuerca más para perjudicar los avances tecnológicos de sus rivales

Biden signs the CHIPS and Science Act

Biden signs the CHIPS and Science Act / EFE / JIM LO SCALZO

Carles Planas Bou

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Estados Unidos endurece sus esfuerzos para limitar las capacidades militares de China y Rusia. El Gobierno de Joe Biden prohibirá la venta de chips sofisticados a dos de sus principales rivales, una medida que escala la Guerra Fría tecnológica entre ambas potencias y que también responde a la escalada de tensión en Taiwán.

Las restricciones de la Casa Blanca bloqueará venta de los semiconductores de alta gama de las compañías Nvidia y Advanced Micro Devices, unos modelos esenciales para la construcción de superordenadores y de sistemas de Inteligencia Artificial (IA). Aunque estas tecnologías empezaron aplicándose en el mundo de los videojuegos, en la última década se ha normalizado su uso tanto para el desarrollo de armas inteligentes como para los sistemas de vigilancia. China, por ejemplo, usa el reconocimiento facial impulsado por la IA para reprimir a los uigures, la minoría musulmana del país.

La decisión de Washington tiene como principal objetivo mermar el acceso de Pekín a tecnología que pueda destinar a usos militares. Además, en los últimos años el régimen chino ha reforzado su capacidad como fabricante de semiconductores, una industria esencial tanto para la electrónica de consumo como para la tecnología militar, aeroespacial o sanitaria mientras que EEUU ha ido perdiendo peso.

Pugna tecnológica

Esa posición inquieta a la administración Biden, que ha impulsado una serie de medidas legislativas para ganar músculo y mermar a sus rivales. Entre ellas, la ley que destinará 52.000 millones de dólares a subsidios para incentivar la construcción de fábricas de chips en el país. Para ello, EEUU tiene como aliado a Taiwán, la mayor superpotencia en la manufactura de chips y, a su vez, un territorio que China reclama como propio. La alianza ha sido fuente de importantes tensiones económicas y geopolíticas, pues el gigante asiático depende de la isla para la fabricación de los semiconductores más avanzados. Siguiendo los pasos iniciados por Donald Trump, Washington también ha restringido el acceso a esos modelos más sofisticados a empresas chinas como Huawei.

Con esta decisión, Biden escala una pugna tecnológica que Pekín ha descrito como una “mentalidad de la Guerra Fría” que perjudicará su cooperación económica y científica. "Tendrán un impacto en la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro globales y en la recuperación de la economía mundial", ha advertido el Ministerio de Comercio de China.

Frenar la capacidad militar china

Nvidia señaló que las restricciones impuestas por la Casa Blanca afectarán a su negocio, que en el segundo trimestre de este año generó unos 400 millones de dólares en ingresos. Sin embargo, las acciones de EEUU pueden ir más allá de estas dos compañías. Según han señalado fuentes del sector al 'New York Times', otras empresas que fabrican herramientas o software de diseño han sido avisadas que no podrán exportar tecnología de alta gama a China.

El Departamento de Comercio ha remarcado que en el futuro podrán tomar nuevas medidas para impedir la adquisición y el uso por parte de China de tecnología estadounidense en el contexto de su programa de fusión militar-civil para alimentar sus esfuerzos de modernización militar, llevar a cabo abusos de los derechos humanos y permitir otras actividades malignas".