Violencia en Sudán

Los enfrentamientos tribales en Darfur dejan más de 160 muertos

La ONU reclama una investigación tras una oleada de violencia en la región sudanesa que ha dejado decenas de miles de desplazados

Imagen de archivo de manifestantes prodemocráticos protestando contra el golpe de Estado en Jartum (Sudán).

Imagen de archivo de manifestantes prodemocráticos protestando contra el golpe de Estado en Jartum (Sudán). / AFP

Agencias

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Más de 160 personas murieron este domingo en Darfur, región al oeste de Sudán, por enfrentamientos armados a causa de la violencia tribal, según el portavoz de la Coordinadora General para los Refugiados y Desplazados de Darfur, Adam Regal. La violencia estalló en Krink, a unos 80 kilómetros de Geneina -capital de Darfur del Oeste- el viernes, cuando ocho personas murieron, precisó el portavoz. Asimismo, al menos 98 personas resultaron heridas en los combates y el balance podría ser mucho mayor.

La violencia se desató el pasado viernes, después de que dos pastores de las tribus árabes fueran asesinados por hombres armados de la tribu africana Masalit, según dijo a Efe una fuente de seguridad en Darfur. Los enfrentamientos derivaron en una campaña de venganza por parte de diversos grupos, mientras que las hostilidades repuntaron durante la jornada del domingo.

Regal ha lamentado que la situación "es difícil y se está deteriorando" y ha acusado a milicias progubernamentales de estar detrás del ataque. En este contexto, ha señalado en redes sociales que milicias 'yanyauid' -acusadas de crímenes de guerra y contra la humanidad en el conflicto en Darfur- irrumpieron en Kereneik tras la retirada de las fuerzas de seguridad de la zona, "dejando a las víctimas a merced de las milicias". En la misma línea, ha hecho responsable de la situación "al Gobierno golpista y a las milicias" y ha reclamado al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y a la Unión Africana (UA) que adopten "medidas decisivas para proteger a los civiles desplazados e indefensos en la región de Darfur".

Por ello, ha reclamado el envío de tropas internacionales, pues ha argumentado que las autoridades militares -responsables de un golpe de Estado en octubre de 2021-, "no tienen el deseo de dar protección a los desplazados en Darfur", sino que "apoyan a estas milicias criminales y les dan protección e inmunidad para aplicar sus planes".

La ONU reclama una investigación

Asimismo, el portavoz de la Coordinadora General para los Refugiados y Desplazados de Darfur ha solicitado al Tribunal Penal Internacional (TPI) que analice de cerca la situación y el ahondamiento de la crisis tras la retirada de las tropas de la Operación Híbrida de la UA y Naciones Unidas en Darfur (UNAMID) a mediados de 2021.

Por su parte, el representante especial de la ONU en Sudán, Volker Perthes, ha condenado los "atroces asesinatos" en Kereneik y los ataques contra instalaciones sanitarias en la zona, por lo que ha reclamado el fin inmediato de la violencia y ha recordado la obligación de proteger a civiles e infraestructuras civiles.

Perthes ha pedido que se acelere el despliegue de las fuerzas de seguridad conjuntas contempladas en el acuerdo de paz entre el Gobierno y diversos grupos rebeldes en octubre de 2020. Asimismo, ha solicitado una investigación "transparente y en profundidad" y que las conclusiones de la misma sean publicados, así como que se identifique a los responsables de la violencia para llevarles ante la justicia. Por último, ha reclamado un acceso humanitario sin restricciones para dar ayuda a los damnificados.

Crisis de desplazados

Además de los muertos y heridos, la oleada de violencia tribal ha provocado que decenas de miles de personas hayan huido, según ha informado este lunes la ONG Consejo Noruego para los Refugiados (NRC, por sus siglas en inglés). "La violencia armada que estalló el viernes en la ciudad de Kreinik, Darfur Oeste, ha desplazado a decenas de miles de personas", dijo en un comunicado NRC. "Localidades en Darfur Occidental están ardiendo ante nuestros ojos y las comunidades son asaltadas una y otra vez. Esta tragedia se está convirtiendo rápidamente en una catástrofe. La espiral mortal de violencia debe terminar", ha dicho el director de la ONG en Sudán, Will Carter.

El NRC ha apuntado que la mayoría de los afectados por los combates en Kreinim ya eran desplazados por otros episodios de violencia y ha agregado que muchos vieron cómo sus hogares eran incendiados en otro incidente hace cinco meses y vivían por ello en un campamento improvisado. Así, ha alertado de que la violencia podría expandirse a Al Geneina, donde hay cerca de 100.000 desplazados. "Pedimos a las partes que reduzcan las tensiones inmediatamente y eviten más daños a civiles. El acceso seguro y libre a los civiles y el acceso de ayuda humanitaria debe ser urgentemente restaurado", ha reclamado Carter.

Darfur vivió una guerra civil de tintes étnicos entre 2003 y 2008, con más de 300.000 muertos y 1,8 millones de desplazados. En los últimos tiempos, la región ha vuelto a ser escenario de frecuentes enfrentamientos tribales, a pesar del acuerdo de paz de octubre de 2020 con varios grupos rebeldes, que intentaba poner fin a los combates que estallaron en 2003.

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