Reaparece el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, tras 15 días de ausencias

Es el alto mando del ejército de Rusia, con permiso del presidente ruso y comandante en jefe supremo de las Fuerzas Armadas, Vladímir Putin. Pero desde hacía 15 días no se sabía nada del ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, cuando hizo su última aparición en la escena pública. Hasta hoy.

El viernes, el Kremlin intentó acallar los rumores diciendo que tenía "mucho trabajo". Las declaraciones no rebajaron la incertidumbre y este sábado ha difundido un vídeo en el que se ve al general presidiendo una reunión dedicada al presupuesto de armas de Rusia.

Las imágenes no tienen fecha, pero el ministro se refiere a una reunión con el ministro de Finanzas que, según las agencias rusas, tuvo lugar el viernes 25 de marzo. En el vídeo, Shoigú afirma que los pedidos y el suministro de armamento marchan según lo previsto "a pesar de las dificultades que atravesamos hoy", en referencia a las sanciones internacionales impuestas como reacción a la ofensiva rusa en Ucrania.

No es una única ausencia relevante del máximo poder ruso. Desde el inicio de la guerra en Ucrania hay especulaciones sobre el paradero y el estado de salud de Putin. El Kremlin sale al paso de los rumores y el jueves publicó una foto de Shoigú en una videoconferencia.

Muy presente durante la primera semana del conflicto

Mientras los medios de comunicación rusos huyen de la censura impuesta por el Kremlin, varias fuentes apuntan a que el líder ruso podría sufrir cáncer o Parkinson. En cambio, la prensa rusa sí que se preguntaba dónde está el general. Y qué le pasaba. Porque Shoigú estuvo muy presente durante la primera semana de la invasión.

El gobierno salió al paso rápidamente. “El ministro de Defensa tiene mucho trabajo, como ustedes comprenderán. Está en marcha una operación militar especial y no hay tiempo para la actividad en los medios. Es totalmente comprensible”, respondió este jueves a los medios el representante del gobierno.

Al fondo de una imagen

Además, el Kremlin difundió una imagen de la videoconferencia que mantuvieron los miembros permanentes del Consejo de Seguridad el jueves con Putin. Shoigú, sin embargo, está al fondo de la imagen y apenas se le reconocía.

Otra lo de los motivos por los que se especula con el estado del alto mando es que este jueves, cuando se cumplía un mes de la invasión de Ucrania, no compareció públicamente para hacer un balance del conflicto. El parte de guerra lo ofreció el portavoz de Defensa, Ígor Konashenkov.

Shoigú, el nacionalconservador

Los nacionalconversadores son una de las cuatro grandes familias que componen el poder ruso. Junto con tecnócratas, liberales prooccidentales y ideólogos antioccidentales han recentralizado el Estado a lo largo del mandato de Putin.

El ministro Shoigú es, junto al el presidente del Parlamento y considerado número dos del país, Vyacheslav Volodin, una de las personalidades más punteras de este grupo, que destaca en las Fuerzas Armadas y en los cuerpos de seguridad del Estado.

Su prioridad es garantizar la soberanía nacional y no consideran que Rusia pertenezca al club europeo de países. Defienden el papel del Estado dentro de la economía y, en particular, reforzar el complejo militar-industrial que suministra armas al Ejército.

Shoigú suele ser un rostro familiar en las pantallas de televisión. Él y Vladimir Putin organizan regularmente viajes a la taiga siberiana, conduciendo vehículos todo terreno, bebiendo té o recogiendo setas.