23 años

Víctor Serrano, el joven de Toledo que se ha ido al frente en Ucrania

Últimas noticias de la invasión de Ucrania, en directo

"Sabes que si entras, no vas a volver. Esto no es un juego, que es una guerra de verdad", asegura

Víctor Serrano, el español que combate en Ucrania

Víctor Serrano, el español que combate en Ucrania / CAPTURA LA PROVINCIA / TELECINCO

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Cada vez aparecen más españoles, muchos de ellos jóvenes que han decidido irse a Ucrania para ayudar a las víctimas de la invasión rusa o, incluso, comnbatir en el frente. Uno de ellos es Víctor Serrano, de 23 años y toledano de origen. Ha dejado el trabajo y se ha separado de su familia para plantar cara al agresor ruso y socorrer a la población civil. Serrano ha aparecido estos días en diferentes programas televisivos donde ha explicado su peripecia personal: "Es mi vocación desde muy pequeño, ayudar a los más necesitados y estar en los momentos más difíciles".

De momento, desde que llegó a Ucrania, se centra en labores "humanitarias". Pero, llegado el caso, está dispuesto "a combatir". Sin embargo, Aunque desde su llegada a territorio ucraniano el joven está colaborando únicamente "de forma humanitaria", ha asegurado que, llegado el caso, está dispuesto "a combatir si es necesario". Sin embargo, admite que carece de "formación militar".  Tampoco tiene el equipamiento necesario para el combate.

De momento está en Leópolis, protegido en un refugio de los bombardeos rusos. Prevé salir en breve hacia zonas ·"n poco más delicadas". "No soy soldado, pero tengo vocación de soldado. Estoy dispuesto a darlo todo", añade.

"No es un juego"

"Mi familia me dice que tiene miedo y se preocupa por mí, pero a la vez me apoyan porque saben que lo que estoy haciendo es algo muy importante y muy bonito para toda esta gente. Nadie dijo que fuera fácil", ha manifestado.

"Soy una persona que cursaba sus estudios y trabajaba por horas en un almacén. Alguien normal. Con ese tipo de vida cotidiano. Estoy aquí en Ucrania porque es mi vocación. Una vocación de entrega militar. Una vocación de entrega a los demás", relata.

"Sabes que si entras, no vas a volver. Esto no es un juego, que es una guerra de verdad. Tengo miedo porque he tomado una decisión en la que sabes que te puedes equivocar, pero que las consecuencias son terribles. No estamos locos, apreciamos nuestra vida tanto como tú y como los demás. Realmente queremos volver, pasamos frío, sueño, dolor", relata.