La UE se resiste a castigar a EEUU por su espionaje masivo

A pesar de que el Parlamento Europeo ha reclamado a los Veintiocho que respondan con firmeza al escándalo del espionaje masivo de Estados Unidos a los gobiernos y ciudadanos europeos, los líderes de la Unión Europea (UE) se resisten en la cumbre de Bruselas a adoptar la más mínima medida de represalia contra la Administración norteamericana, ni siquiera tras los últimos datos que indicaban que los servicios secretos de EEUU había espiado incluso el teléfono móvil de la cancillera alemana, Angela Merkel.

Los líderes europeos han expresado su indignación ante las nuevas revelaciones de los abusos de su aliado norteamericano, pero se han limitado a insistir en el reforzamiento de la legislación de protección de datos sin ir más lejos. Incluso alguno de ellos, como el primer ministro sueco, Frederik Reinfeldt, y el primer ministro finlandés, Jyki Katainen, han efectuado un llamamiento a la "prudencia" y se han opuesto a paralizar las negociaciones del acuerdo de libre comercio entre la UE y EEUU porque ese acuerdo "es muy importante".

SCHULZ PIDE UNA RESPUESTA

El presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, ha instado a los líderes de los Veintiocho a suspender de inmediato el acuerdo que permite a EEUU tener acceso a los datos de las transferencias bancarias de los ciudadanos europeos en el marco de la lucha antiterrorista y a paralizar las negociaciones del acuerdo de libre comercio con EEUU mientras no se aclare las revelaciones sobre "el espionaje a gran escala organizado por la Administración norteamericana de los embajadores de la UE, al Parlamento Europeo, a los jefes de gobierno europeos y a los ciudadanos".

"El escándalo de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) norteamericana es una señal de alarma", ha subrayado Schulz a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE al inicio de la cumbre. "¿Cómo podemos negociar un acuerdo de libre comercio con EEUU si los representantes norteamericanos saben exactamente lo que vamos a proponer en la mesa de negociaciones antes de que lo hagamos? Estas negociaciones no pueden funcionar así", ha argumentado Schulz posteriormente en una conferencia de prensa.

"¿Se imaginan la reacción de EEUU si los servicios secretos europeos hubieran espiado al presidente norteamericano, Barack Obama?", se ha preguntado en público Schulz.

ALEMANIA TIENE PRUEBAS

"Espiarse entre amigos y aliados es inaceptable", ha afirmado con contundencia Merkel al llegar a la cumbre europea. "No se trata principalmente de mí, sino de todos los ciudadanos", ha añadido la cancillera. La alianza entre la UE y EEUU "solo puede basarse en la confianza" y esta confianza "tiene que ser restablecida", ha advertido advirtió Merkel. La cancillera también ha instado a los demás líderes a reflexionar sobre "qué tipo de acuerdos de protección de datos" necesita Europa.

El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, ha explicado que el Gobierno disponía de "información precisa" sobre el espionaje al teléfono móvil Merkel después de convocar formalmente al embajador norteamericano en Berlín para exigirle "una explicación seria y sin vacíos" sobre el pinchazo al citado teléfono de la cancillera. "Sin motivos ni indicios muy serios no hubiésemos dado un paso diplomático de esta gravedad", ha asegurado Westerwelle tras la reunión.