Álvaro Uribe: "No negociaremos para que la guerrilla se apodere del país"

GONZALO CÁCERES / BOGOTÀ

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

LUGAR DE NACIMIENTO:MEDELLÍN, EN 1952

ESTUDIOS:DERECHO

TRAYECTORIA POLÍTICA:FUE SECRETARIO GENERAL DEL MINISTERIO DE TRABAJO (1977-1978), ALCALDE DE MEDELLÍN (1982), SENADOR (1986-1994) Y GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE ANTIOQUIA (1995-1997). ES EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DESDE EL 2002.

La ola de gobiernos de izquierda que se ha instalado en América Latina ha arrinconado como a una oveja negra al presidente colombiano, Álvaro Uribe. Sin embargo, en los últimos tiempos, en el peor momento de su carrera política y salpicado por el escándalo de los paramilitares, Uribe ha recuperado terreno internacional. En las pasadas semanas ha recibido la vista del presidente de EEUU, George Bush; del jefe del Estado alemán, Horst Köhler, y también del rey Juan Carlos.

--Los vínculos entre políticos conservadores y los paramilitares han levantado un escándalo político en Colombia. ¿Eso puede poner en peligro el proceso de paz?

--Este es el primer proceso de paz, en Colombia y en el mundo, que pone la justicia en el primer plano. En el pasado, muchos guerrilleros colombianos fueron indultados y amnistiados aunque eran responsables de crímenes atroces. Hoy no se puede. El nuestro es el primer proceso de paz que exige una reparación, y debo recordar que muchos de mis críticos no repararon a sus víctimas cuando amnistiaron a guerrilleros que ahora están en la política.

--Y eso ha cambiado con Uribe.

--Lo que se está viendo ahora en Colombia es el resultado de nuestra política de seguridad y de la ley de justicia y paz que aprobó nuestro Gobierno. Y por eso apoyamos la justicia y promovemos la verdad, porque finalmente lo único que queremos lograr es que Colombia tenga un futuro sin guerrilla, sin paramilitares y sin narcotráfico. La inmensa mayoría de los hechos que se revelan ocurrieron antes de mi Gobierno.

--¿Espera que con esos argumentos los europeos cambien de opinión en relación con su Gobierno?

--Los europeos saben que mi Gobierno es el primero que ha combatido a los paramilitares. Saben que hemos dado todas las garantías a la oposición, que aquí no hay una dictadura. Las elecciones del 2006 demostraron por qué nuestra seguridad es democrática: porque ha creado un marco totalmente transparente y eficaz para que opere la democracia.

--¿Y por todo eso usted se merece el apoyo de Europa?

--Queremos trabajar con Europa y acelerar un acuerdo de asociación, de diálogo político y de cooperación con la UE. Es muy importante que Europa nos pueda ayudar en la lucha contra la droga, que financia el terrorismo. Pueden ayudarnos en la erradicación manual y en un programa para proteger la selva amazónica. Hay que convertir a las familias campesinas en guardabosques y pagarles para que cuiden la selva, que es un pulmón de la humanidad. Lograr que no destruyan la selva para sembrar drogas.

--¿Cuáles son los objetivos de su Gobierno?

--Son tres: consolidar la seguridad, llevar los niveles de inversión a no menos del 26% del PIB, con una gran participación del sector privado, y reducir la pobreza del 60 al 35%. Ahí puede ver la relación entre seguridad, que da confianza; inversión, con énfasis en el sector privado, y responsabilidad social de la inversión para reducir la pobreza.

--¿Qué impide a Colombia superar la pobreza?

--Cuarenta años de terrorismo, que ya estamos superando. Lo demuestran las cifras: en el 2003, nuestra economía creció el 3,75%, después de un estancamiento; en el 2004, algo más de un 4%; en el 2005, por encima del 5%, y en el 2006, todo indica que creció más del 6%. Y eso en un país que no produce petróleo.

--¿Cuál es la clave de la violencia que padece el país desde hace varias décadas?

--Aquí no hay división del Estado en dos. Aquí lo que hay es el desafío de un terrorismo rico, financiado por la droga, que ataca a la democracia. Nuestra política de seguridad democrática tiene toda la decisión de derrotar ese terrorismo.

--Hay quienes creen que el problema de la guerrilla no es militar y que hay que resolverlo políticamente.

--El terrorismo rico no va a negociar hasta el día en que note que el Estado democrático es capaz de derrotarlo. Durante mi Gobierno se han desmovilizado 40.000 terroristas que estamos reinsertando, gracias a nuestra política de seguridad. Solo cuando el Estado ha combatido a los terroristas en sus feudos, muchos han tomado la decisión de reinsertarse.

--¿Qué piensa de las opiniones críticas que se dan en algunos países europeos sobre la política de su Gobierno con la guerrilla?

--El Gobierno está abierto al diálogo, pero este tiene que ser de buena fe. En el pasado, las guerrillas utilizaron la voluntad de diálogo de los gobiernos para crecer. Los periodos de más crecimiento de la guerrilla han sido los de diálogo. Nosotros de ninguna manera vamos a negociar para que la guerrilla se apodere del país. Negociar generosamente para que se reintegren a la vida constitucional del país, por supuesto. De hecho, hoy estamos generando una negociación con el Ejército de Liberación Nacional.

--América Latina aparece en el panorama mundial como una región bastante dividida. ¿Lo comparte?

--América Latina tiene que unirse alrededor de la diversidad. De manera unida hay que buscar acuerdos con Europa, con Asia y entre nosotros.

--¿Qué futuro le ve usted a la Comunidad Andina?

--La región tiene una gran importancia en el Pacifico, el Caribe y la Amazonia. Tiene tres países muy importantes en la producción de hidrocarburos: Venezuela, Bolivia y Ecuador. Progresa en producción manufacturera y agrícola, tiene un gran futuro minero y, como es el caso de Colombia, un gran futuro en biocombustibles.

--Sus vecinos son cada vez más críticos con EEUU, que es un estrecho aliado suyo. ¿Ve usted en eso un problema grave para las relaciones en el continente?

--No debería serlo, porque necesitamos estar unidos. Nosotros miramos más hacia un largo proceso histórico que hacia lo coyuntural. Y somos amigos de todos los países del continente.

--Al lado de Colombia hay una nación a la que en Europa se atribuyen tendencias populistas peligrosas. ¿Qué opina de Hugo Chávez?

--No opino. Cualquier opinión tiene que ser positiva, no negativa... Nuestra política internacional es de prudencia en el discurso y efectividad en las relaciones.