Barcelona es muy vulnerable a los terremotos

El 60% de los edificios de Barcelona hechos de estructura de ladrillo, los más antiguos, y el 30% de los de hormigón son "muy vulnerables" a terremotos, según un estudio de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). El trabajo indica que, aunque la posibilidad de que ocurra un seísmo en Catalunya y específicamente en Barcelona es baja, las consecuencias serían considerables "aun con un terremoto de poca intensidad".

El objetivo del estudio, publicado en la revista Soil Dynamics and Earthquake Engineering, es desarrollar un método de evaluación de riesgo sísmico como herramienta de gestión.

En Barcelona, la mayor parte de los edificios residenciales fueron diseñados sin tener en cuenta criterios sismorresistentes, por lo que la UPC los ha identificado como una "fuente potencial de daño". Para llegar a estas conclusiones, los tres autores del trabajo (Àlex Barbat, Nieves Lantada y Lluís Pujadas) analizaron 60.653 edificios residenciales con estructuras de ladrillo u hormigón armado, lo que supone el 97% del total de las casas de Barcelona.

SOPORTAR EL DESPLAZAMIENTO

Los edificios con estructura de hormigón, los más modernos, presentan una mayor resistencia --soportarían un desplazamiento horizontal de cuatro centímetros-- porque son más dúctiles.

Por distritos, Ciutat Vella sería el más afectado justamente por tener las edificaciones más antiguas, casi exclusivamente de ladrillo. Concretamente, dice el trabajo, entre el 40% y el 50% de los edificios de Ciutat Vella podría sufrir daños graves. En el caso del Eixample, el segundo distrito peor parado, el porcentaje oscila entre el 30% y el 40%. En el resto de la ciudad, las viviendas afectadas serían muchas menos.