Testimonios

Los usuarios urgen la conexión ferroviaria entre el Vallès: “No quiero coche para ir de Granollers a Terrassa”

Usuarios del área donde conviven más estaciones de Rodalies y FGC explican a EL PERIÓDICO sus necesidades de movilidad

NOTICIA | Se activa la licitación del estudio informativo para la nueva conexión ferroviaria del Vallès

CONTEXTO | El Vallès, epicentro de la convivencia Rodalies-FGC: "Preferiría pagar pero tener un buen servicio"

Testimonios

Testimonios / ELISENDA PONS

Clàudia Mas

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El Vallès se ha consolidado como el epicentro de la convivencia entre Rodalies Renfe y Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), ya que alberga un gran número de estaciones y líneas ferroviarias. Sin embargo, la conexión entre el Vallès Occidental y el Oriental sigue teniendo muchas carencias en términos de eficiencia y accesibilidad. Los usuarios que quieran trasladarse de un Vallès al otro tienen que realizar trayectos que alcanzan hasta las dos horas para recorrer un tramo de tan solo 16,40 km. De hecho, el Gobierno ha puesto en marcha un estudio para poder conectar ambas comarcas.

El PERIÓDICO se ha trasladado a algunas estaciones de los Valleses, donde una decena de usuarios del transporte público consultados a pie de vía expresan su opinión sobre la conexión entre los dos Valleses. Como tónica general, los viajeros no lo utilizan para desplazarse de una comarca a otra y optan por la opción de utilizar el coche, ya que no hay conexión ferroviaria directa.

Por ejemplo, para ir de Granollers a Terrassa los usuarios están obligados a acercarse a Barcelona para hacer un cambio de vía en Montcada i Reixac. “Además, se le debe de sumar el tiempo de espera que generan las incidencias cotidianas de la Renfe”, puntualiza Sergio González (19 años), vecino de Granollers y usuario de Rodalies. 

Por su parte, Nina Ortega (22 años) reclama desde la Estación de Sabadell Centre la necesidad urgente de una conexión directa: “Prácticamente, no he ido nunca al Vallès Oriental, ya que la falta de trenes lo dificulta”. Pese a la cercanía física, en el imaginario de los usuarios, la comarca vecina queda lejos, fruto de las malas conexiones del transporte público. 

“Ni me planteo ir hasta el Vallès Occidental. Sin coche y con mala conexión de trenes, ¿qué hacemos? Es como si no existiera”, dice Brenda Ferrer (30 años) residente de Granollers. 

Brenda Ferrer en la estación de Granollers Centre

Brenda Ferrer en la estación de Granollers Centre / ELI PONS

Un estudio para conectar las comarcas

Las conexiones ferroviarias en el Vallès no únicamente están en boca de los usuarios, sino que también están muy presente en despachos y agendas de políticos. Así, el pasado 3 de noviembre, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana licitó un estudio informativo para conectar las líneas de Rodalies R4 y R8 con la finalidad de crear una conexión directa entre Sabadell y Terrassa hasta Granollers. Una unión que podría ubicarse cerca del centro comercial Baricentro, entre Barberà y Cerdanyola.

“La conexión entre comarcas parece del siglo pasado”

El proyecto dispone de un plazo de ejecución de 30 meses y cuenta con una dotación presupuestaria de 907.500 euros. La mayoría de los usuarios preguntados por EL PERIÓDICO desconocen la existencia del proyecto ni tampoco depositan muchas esperanzas: “Dicen mucho y luego hacen poco. Si al final, la conexión entre ambas comarcas parece del siglo pasado”, se queja, con vehemencia Paula Meneses (20 años) desde la estación de Granollers Centre. “No es justo para los pasajeros, parece que la tecnología avanza, pero, en cambio, esto siempre sigue igual”, añade la joven. 

“Me compadezco de los que tienen que cruzar el Vallès”

“Nosotros porque somos jubilados y al final, si no tenemos que esperar, pues no esperamos aquí”, bromean Mari Carmen Rodríguez (67 años) y Francesc Segura (70 años), dos jubilados que esperan pacientemente la llegada del tren que les llevará de Granollers a Mataró. “Ya me compadezco de aquellos que se tienen que desplazar en tren hasta el Vallès Occidental. Además de parecer un laberinto, es una pérdida de tiempo”, reflexiona Mari Carmen quien no se plantea ir con transporte público hasta la comarca vecina; ella prefiere ir a Barcelona o al Maresme, ya que no quiere utilizar el coche para ir al Vallès Occidental.  

"Además de parecer un laberinto, es una pérdida de tiempo”

Por su parte, Francesc vive de cerca las “frustrantes” conexiones entre comarcas. Explica como lo sufre su hijo Joan, puesto que su pareja reside en Terrassa y ninguno de los dos dispone de carnet de conducir: “¿Qué hacen? Tener paciencia y muchas ganas de verse. Pero hay días que el trayecto se ha alargado hasta cuatro horas”, cuenta Francesc mientras comparte con desesperación algunas de las “aventuras ferroviarias” que han vivido tanto su hijo como su pareja.  

Francesc Segura y Mari Carmen Rodríguez esperan pacientemente el tren que los llevará a Mataró

Francesc Segura y Mari Carmen Rodríguez esperan pacientemente el tren que los llevará a Mataró / ELISENDA PONS

Manel Rodríguez (25 años) e Irene Vílchez (23 años), en cambio, son dos voces discordantes en el conjunto de las experiencias recogidas: ellos sí que viajan hasta la otra comarca, pero sin pisar las capitales occidentales (Sabadell y Terrassa).

Ambos son estudiantes y se trasladan cada día laborable a la Universitat Autònoma de Barcelona, que sí que está bien conectada con Granollers a través de la R8, cuya estación se encuentra en el municipio de la Cerdanyola del Vallès. De todos modos, ambos reclaman una mayor frecuencia, ya que los trenes salen cada hora: “No tienen nada que ver los tempos que siguen los trenes que van dirección a Barcelona que pasan cada 12 minutos”, lamenta Vílchez. 

“No pisaré nunca más el transporte público”

Oriol Baquero (20 años) es de Sabadell y está realizando las prácticas de programación en una empresa de Granollers. Para no hacer equilibrios entre vías de trenes y sin la garantía de llegar a la hora, debido a las múltiples incidencias, ha optado por otra ruta.

“Estoy sacándome el carnet de conducir para cruzar el Vallès”

Por lo que ha decidido optar por el bus número 348 que va desde Sabadell Centre hasta Granollers Centre y finalmente, coge un tren de una sola parada que llega a Canovelles, donde se ubica la empresa. Un trayecto que, explica, en coche lo haría en menos de 30’ y con transporte público tarda prácticamente 2 horas. 

Así, Baquero, explica que actualmente está cursando las prácticas para sacarse el carnet de conducir y, con un tono contundente, manifiesta que únicamente se lo saca por poder venir a trabajar. Una vez lo tenga, concluye: “No pisaré nunca más el transporte público”, algo contrario a la voluntad de la implementación de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) que prevén reducir la contaminación y potenciar el transporte público. Las ZBE del Vallès se enmarcan bajo la propuesta  de la asociación de municipios del Arc Metropolità, presentada el pasado octubre.

Oriol Baquero en la estación de Granollers Centre

Oriol Baquero en la estación de Granollers Centre / ELISENDA PONS